El Honda NSX de Senna

El fin de semana del 22-23 de febrero se celebrará la subasta Silverstone Auctions Race Retro & Classic Car Sale (en Stoneleigh Park, cerca de Coventry, Inglaterra), en la que saldrán a la venta un importante número de automóviles clásicos deportivos, además de relojes, joyas y complementos. Se puede echar un vistazo a los modelos que se subastarán en el enlace de la web, pero entre todos ellos destaca uno que se anuncia como: Honda NSX 1992 ex-Ayrton Senna. Su precio estimado entre 75.000 y 85.000 libras esterlinas (entre 91.000 y 103.000 euros).
A priori parece interesante, pues ya de por si el Honda NSX es un deportivo “coleccionable” cuyo valor no puede bajar, sino en todo caso lo contrario, subir. Y que lo haya conducido el gran genio brasileño le da un pedigrí asombroso, por lo que incluso nos podría parecer “una ganga”, sobre todo si el interesado es uno de los numerosísimos fans de Ayrton Senna. Al fin y al cabo no es más que doblar el precio orientativo del Honda NSX, cuyas unidades de propietarios anónimos en el mercado de ocasión se venden por unos 50.000 euros, o incluso menos.

El quid de la cuestión es que en realidad el propietario oficial del Honda NSX matrícula 41-02-AO no fue Senna, sino su gran amigo Antonio Carlos de Almeida Braga, quien lo domicilió en su palacete de Sintra, cerca del circuito de Estoril, para que Senna lo condujese cuando estuviese en tierras portuguesas. En la actualidad sólo cuenta con 31.800 millas (51.177 km). Pero además de este NSX negro con el interior en piel negra al tricampeón del mundo de F1 se le atribuyen otros dos NSX, otro rojo domiciliado igualmente en Portugal (que se vendió recientemente a un entusiasta británico), y un tercero que poseía en Sao Paulo (Brasil). No dudamos que Senna condujese en más de una ocasión el NSX que vemos en las fotos, aunque de ahí a venderlo como “NSX ex-Ayrton Senna”…Es un poco dudoso atribuir este Honda NSX a Aytorn Senna, aunque sí es seguro que lo condujo en alguna ocasión
Polémicas a parte, el impresionante deportivo japonés hizo historia en los 90, y Ayrton Senna –piloto oficial por aquel entonces de McLaren-Honda- participó en la puesta a punto del deportivo de calle. En 1992 el Honda NSX costaba en España 12 millones de pesetas (72.000 euros) y era uno de los automóviles más deseados, al nivel de un Ferrari. Su motor V6 atmosférico entregaba 270 cv, lo que unido a su ligera y aerodinámica carrocería le permitía acelerar de 0 a 100 km/h en 5,9 segundos y alcanzar los 270 km/h.    

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