Covey se pasa a las eléctricas
El futuro al que tradicionalmente se asociaba el uso de los vehículos eléctricos para sectores profesionales y particulares está cada vez más presente, una vez se han despejado ya todas las dudas sobre la conveniencia o no de apostar por ellos.
El ahorro es un factor importante que desequilibra la balanza, pero a ello se ha unido desde hace años que cada vez son más las ciudades con restricciones a la combustión en sus Zonas de Bajas Emisiones (ZBE).
Quedaba un problema por resolver, el de la recarga de los vehículos, pero las empresas y autónomos que se dedican al transporte de mercancías en entornos urbanos ya han encontrado soluciones, ya sea instalando cargadores en sus domicilios, o haciendo uso de nuevas zonas de carga que poco a poco van invadiendo las ciudades.
En este escenario y para dar respuesta a la creciente demanda, una empresa líder en el alquiler de vehículos industriales como Covey ha puesto a disposición de sus clientes dos nuevas gamas de furgonetas eléctricas Maxus eDeliver, referentes en innovación y eficiencia, la mejor solución para los repartos urbanos por su rendimiento, autonomía y capacidad de carga.
Amplia gama
Con presencia en casi todas las ciudades españolas, un repartidor que, por ejemplo contrate el alquiler de furgonetas en Madrid y que desarrolle su trabajo por la capital, tiene a su disposición furgonetas paqueteras y frigoríficas de hasta una tonelada de carga útil, una autonomía de hasta 220 kilómetros y unos tiempos de carga rápida que oscilan entre los 35 y los 45 minutos.
En el caso de los vehículos frigoríficos, cabe recordar que Covey es además líder nacional en alquiler de furgonetas frigoríficas y dispone de vehículos que mantienen la cadena del frío durante ocho horas, cubriendo las exigencias de los proveedores y sus clientes.
A estas ventajas hay que unir las que Covey ofrece con su conocimiento del mercado, ya que desde hace 25 años se adapta a las necesidades de particulares y empresas. Desde el primer minuto, y sus clientes pueden despreocuparse de la gestión de su furgoneta, ahorrando costes y saliendo a la carretera con la seguridad de contar con un buen servicio.
En términos económicos, ¿Es sencillo calcular el ahorro anual en combustible al dejar el diésel para apostar por una furgoneta eléctrica? Lógicamente, depende del uso, pero un transportista o repartidor que realiza rutas de 200km al día, con un gasto aproximado de 25€ de gasoil por días, puede ahorrar al año entre 4.000 y 5.000 euros recargando en las horas de menor coste eléctrico, cumpliendo además con todos los requisitos medioambientales para circular por el centro con tranquilidad.
Recargas
La forma más económica de recargar una furgoneta eléctrica es hacerlo en el domicilio particular. El coste de disponer de este servicio varía en función de si es un enchufe doméstico o wallbox, pero esta inversión supone a medio plazo un ahorro en torno al 60% en comparación con la recarga en una electrolinera.
Después, el precio por recarga ronda los 55 euros, ya que las furgonetas Maxus tienen una batería de 72 kWh, un coste significativamente menor que el de llenar el depósito de una furgoneta de combustión, que supera con creces los 100€.
También para particulares
El alquiler de furgonetas de Covey tiene también una demanda creciente entre los clientes particulares, que recurren a ellas para mudanzas domiciliarias o por la necesidad de llevar objetos de elevado tamaño a la oficina o a otra residencia, y que, cada vez más, descubren las ventajas de optar por un alquiler de furgoneta en lugar de recurrir a la contratación de empresas especializadas que suponen un coste considerablemente más alto.