Enfrentamiento Gobierno-Fabricantes
Las incógnitas en torno al automóvil eléctrico siguen siendo una de las grandes preocupaciones de los fabricantes de coches en nuestro país. Obligados a invertir más de 26.000 millones de euros para incentivar la Investigación y Desarrollo (I+D) en busca de coches más limpios, las direcciones generales de las siete marcas que se reparten el pastel de la automoción en nuestro país hablan de las contradicciones del Gobierno de Zapatero en el tema del coche verde. A finales de 2008 las predicciones hablaban de 1.000.000 de vehículos eléctricos circulando por nuestras carreteras en 2014; hace pocas semanas se redujo la cifra a 250.000 unidades para esa misma fecha. ¿Y ahora qué? Pues el director general de Automóviles Citroën España, Alfredo Villa, tiene claro que pretensiones tan elevadas son una quimera, y más en el actual entorno económico. El coche eléctrico se debe adaptar a la sociedad, y no al revés, como pretende el Gobierno, afirmó Vila, que tiene claro que la propulsión eléctrica es una opción más, pero no la única.
En el marco de la conferencia Automóvil: nuevos retos, celebrado en el hotel Ritz de Madrid, en el Foro de España Innova, el máximo responsable de la firma francesa en España habló de los imposibles que exige la Administración. No se nos puede pedir un esfuerzo en materia de seguridad, con lo que eso implica, coches más pesados como consecuencia de la avanzada tecnología, y que al mismo tiempo se creen coches más ligeros, menos contaminantes y que consuman menos, señaló Vila, que siguiendo por esta argumentación no se olvidó del incremento de peso que suponen: el acero de las carrocerías (en pro de coches reutilizables y reciclables), los filtros y catalizadores del motor o el equipamiento de serie. Para conjugar todos estos elementos con un coche más limpio, de 0 emisiones, se requiere una fuerte inversión por parte de las marcas en materia de I+D; y eso lo debe entender el Gobierno, apuntó. Vila definió como insostenible para el sector la situación, en un momento complicado tanto por la coyuntura económica como por la rentabilidad.
Citroën, que según Jato Dynamics tiene una flota que contamina una media de 139 g/km, de las más bajas entre los grandes productores de automóviles, y un 42% de sus coches está por debajo de los 129 g/km de emisiones de CO2, tiene que seguir invirtiendo en investigación para responder a normativas tan exigentes como la Euro6 o el Reglamento de Emisiones de CO2. En este sentido Vila se mostró confiado en la optimización que está sufriendo toda la gama de motores de combustión de Citroën. ?stos serán los dominarán el mercado a medio plazo. Hoy, más del 50% de los coches vendidos en Europa emiten un máximo de 140 g/km de CO2, afirmó. Para el directivo es muy importante el esfuerzo que está haciendo Citroën para introducir las innovaciones tecnológicas, véase el sistema de parada y arranque automático del motor o el alternador de recuperación de energía en las frenadas, en toda su gama. Para 2011 todos nuestro modelos incluirán estas mejoras, informó.
Con independencia del recorrido a medio-largo plazo que tenga en España coche eléctrico, categoría en la que Citroën competirá a partir de finales de año con el Z-Cero autonomía de 130 km-, la preocupación de Vila ahora se centra en la renovación del Plan 2000E, al tiempo que reclama un replanteamiento por parte del Gobierno en la subida del IVA, que calificó de inesperada. Esperamos que este problema se solucione. De lo contrario, empañará los efectos positivos del plan y generará desconfianza, resumió. El máximo responsable de Citroën en nuestro país está convencido de que este incremento impositivo influirá en el ritmo de ventas. Creemos que se volverá a la tendencia de 2009, antes de la instauración del Plan 2000E, con unas ventas nunca superiores a los 800.000 turismos anuales, concluyó un Vila que, tras las últimas salidas al mercado del nuevo C3 y el coqueto DS3, espera para final del presente ejercicio el remodelado C4 y en 2011 la berlina DS5, que llegará con un motor Full Hybrid formado por un motor térmico diésel HDi FAP y un propulsor eléctrico.