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SALIDO DE LAS PROFUNDIDADES
Italdesign ha reinterpretado el diseño del Chevrolet Corvette de una forma muy particular, conjugando el más puro estilo de Giugiaro sin perder las señas identificativas de este mítico modelo americano.
El pasado 4 de marzo se presentó, en el Salón del Automóvil de Ginebra, uno de los prototipos más llamativos de los últimos tiempos. Coincidiendo con el 50º aniversario del deportivo americano por excelencia, el Chevrolet Corvette, Giugiaro rinde homenaje a ese mítico modelo con el Moray, un concept car realizado sobre la base del Corvette actual. Las líneas suaves y aerodinámicas de este proyecto y los grupos ópticos delanteros, largos y estrechos, colocados en posición vertical, recuerdan a una de las especies de morena que habitan en las aguas del Mediterráneo, y de ahí precisamente viene el nombre Moray, que es el término inglés que define a este animal.
Pablo Mallo
4 de julio de 2003
Modificado pero inconfundible
MODIFICADO PERO INCONFUNDIBLE
Giugiaro ha modificado drásticamente la silueta del Corvette, pero ha dejado en su sitio ciertos detalles característicos que hacen inconfundible la procedencia de este prototipo. Es el caso de la parte trasera, que mantiene los clásicos pilotos dobles. También es muy típico el largo capó, bajo el cual se esconde el enorme propulsor V8 de seis litros de cilindrada y más de 400 CV.
Los redondeados y sinuosos trazos de la carrocería contrastan con la angulosa y marcada zaga, de estilo algo retro. También es un guiño a los antiguos prototipos futuristas de los años 60 la gran semicúpula acristalada, que se puede desmontar parcialmente para poder circular a cielo abierto. Su sistema de sujeción y la apertura tipo alas de gaviota posibilitan un fácil acceso al interior del habitáculo. El montante central se ha sustituido por un arco de acero, al que se sujetan las puertas. Por otra parte, el techo y las ventanas laterales convergen formando una sola pieza.
Las dimensiones externas varían ligeramente respecto al modelo del que procede. Es algo más corto (4.540 mm.), notablemente más ancho (1.950 mm.) y un poco más alto debido a la forma de la cúpula (1.235 mm.).
La ausencia de espejos retrovisores exteriores responde a cuestiones de diseño. Han sido reemplazados por una cámara de televisión, que transmite su imagen a una pantalla ubicada en el salpicadero.
IMAGINACION A BORDO
El interior está realizado con esmero y la empresa Dräxlmaier Group se ha encargado de revestir de cuero todas las zonas que pueden entrar en contacto con las manos de los ocupantes. Esta compaa es conocida porque tambi?n ha firmado algunos interiores como el del BMW Z8, los paneles de las puertas del Serie 7 (integrando airbags y varios componentes eléctricos), y otros de marcas como Mercedes-Benz, Maybach, Bugatti y Volkswagen.
Las zonas del conductor y del acompañante tienen un diseño simétrico, como si ambas tuvieran un cuadro de instrumentos. A su vez, el habitáculo parece fundirse con la carrocería, ya que hay zonas que comparten el mismo color, lo que otorga una nota de originalidad, al mismo tiempo que incrementa la pureza de líneas.
SUEÑO AMERICANO
Giorgetto y Fabrizio Giugiaro comentaron: ‘Hemos tratado de homenajear los principios dictados en la época dorada de los ‘muscle-car’ americanos: la simplicidad y el pragmatismo, en combinación con el concepto hedonista de deportividad que ha perdurado hasta nuestros días a lo largo del tiempo’. Todo esto se consigue de forma inigualable en el Moray.
A la antigua usanza.
El chasis, a la antigua usanza, cuenta con una estructura de una sola pieza que rodea casi todo el perímetro del coche. La suspensión es de ruedas independientes con paralelogramo deformable, dobles triángulos superpuestos y barra estabilizadora. La potencia del motor pasa hasta el tren trasero a través del árbol de transmisión, que está ubicado dentro de un tubo hueco. La caja de cambios tipo Transaxle se encuentra acoplada a este eje. Es automática de cuatro velocidades.
Los enormes neumáticos encargados de transmitir toda la potencia al suelo van montados en unas espectaculares llantas de 20 pulgadas. Son unos Michelin Pilot Sport, de la medida 335/30 ZR20, que llaman la atención por su anchura; los delanteros son algo más discretos, pero también son de una medida nada despreciable: 255/35 ZR20.Con el Moray, Giugiaro ha sabido captar la esencia del sueño americano pero, sin duda alguna, imprimiendo su toque personal y su maestría.