Chevrolet vuelve a levantar la mano en la pelea por los SUVs ligeros con su tercera generación del Equinox, la cual ya fue presentada de manera oficial dentro de nuestro país.
Esta edición de la Equinox abandona el motor de 2.4 litros de aspiración natural para acoplarse con una planta de poder de 1.5 litros, al igual que el del Malibu, que topa los 170 caballos de fuerza y se acopla a una transmisión de seis velocidades.
Por otro lado, Equinox se ha convertido en el primer producto dentro del mercado mexicano en integrar Wi-Fi dentro del vehículo. Ahora la camioneta también funciona como un hotspot, es decir, hasta siete dispositivos ya se podrán conectar al mismo tiempo. La manera en la que esto funciona es a través del sistema OnStar 4GLTE y lo único que se debe hacer es conectarse a través de Wi-Fi, como si lo hicieras en cualquier otro lugar, lo que te garantiza para tener internet a lo largo de tu trayecto, así lo podrán utilizar cualquiera de los cuatro pasajeros del vehículo.
El cambio sustancial del modelo 2018 de la Equinox ocurre con una estructura de acero de alta resistencia, reduciendo así hasta 180 kg. Gracias esta nueva combinación de peso y potencia, la dinámica de manejo ha cambiado y se le puede exigirle en ciertos momentos para obtener otra respuesta, sobre todo cuando nos encontramos a muchos metros de distancia sobre el nivel del mar.
En el exterior del vehículo se integra la tecnología LED, rines de 19 pulgadas y quemacocos panorámico.
La pantalla táctil del tablero es de ocho pulgadas, desde la cual se pueden controlar todos los comandos del automóvil.
Los sistemas operativos Apple CarPlay y Android Auto están disponibles, al igual que un cargador inalámbrico para smartphone, seis puertos USB y un sistema de sonido de siete bocinas a cargo de la marca Bose.
Cuatro versiones a la venta en México a mediados de julio, yendo desde los 456 mil, hasta los 547 mil pesos con la versión Premier Plus.