BMW eDrive es la nueva tecnología de propulsión para todos los automóviles eléctricos de BMW i, así como para los modelos híbridos enchufables de la marca. Con la experiencia de los i3 e i8, y después de anunciar variantes de esta naturaleza en el X5 (X5 xDrive40e) y en la venidera generación del Serie 7, BMW presenta dos nuevos modelos que combinan las prestaciones de las motorizaciones térmicas turboalimentadas para garantizar las prestaciones, el empleo de materiales ligeros, el profundo trabajo aerodinámico de estas versiones (en el BMW 330e baja el Cx a 0,27) y la posibilidad de una conducción puramente eléctrica.
A diferencia de los híbridos tradicionales (por ejemplo el BMW ActiveHybrid3 con sus escuetos cuatro kilómetros de autonomía eléctrica), los nuevos híbridos enchufables ofrecen la posiblidad de recorrer más cantidad de kilómetros en modo eléctrico, sin emitir emisiones. Para esto necesitan de baterías de mayor capacidad que, además de ocupar más espacio (bien bajo el maletero, en el caso del BMW 330e le hace perder 110 litros, o bien bajo el suelo de la fila trasera, que en el BMW 225xe le resta centímetros de altura libra al techo) y aumentar el peso total del vehículo, ofrecen la posiblidad de recargarse externamente mediante una toma un enchufe normal o el sistema BMW i Wallbox.Las baterías más grandes tienen como consecuencia el aumento del peso y la reducción del espacio interior
BMW 330e 2016
La nueva versión híbrida enchufable del Serie 3 llegará al mercado el primer trimestre de 2016 con una potencia conjunta de 252 CV. Se obtienen de un motor gasolina de cuatro cilindros de 184 CV y uno eléctrico de 88 CV que una transmisión automática de ocho relaciones conecta a las ruedas traseras. Aunque no es tan potente como el ActiveHybrid3 (306 CV), su compromiso entre prestaciones y consumos homologados es muy bueno: acelera de 0 a 100 en 6,1 segundos, alcanza los 225 km/h de velocidad máxima y declara entre 1,9 y 2,1 l/100 kilómetros en ciclo mixto según el tamaño de los neumáticos.
La nueva versión híbrida enchufable del Serie 3 llegará al mercado el primer trimestre de 2016 con una potencia conjunta de 252 CV. Se obtienen de un motor gasolina de cuatro cilindros de 184 CV y uno eléctrico de 88 CV que una transmisión automática de ocho relaciones conecta a las ruedas traseras. Aunque no es tan potente como el ActiveHybrid3 (306 CV), su compromiso entre prestaciones y consumos homologados es muy bueno: acelera de 0 a 100 en 6,1 segundos, alcanza los 225 km/h de velocidad máxima y declara entre 1,9 y 2,1 l/100 kilómetros en ciclo mixto según el tamaño de los neumáticos.
En el BMW 330e la autonomía eléctrica, en la mejor de las situaciones, es de 40 kilómetros. Las baterías de iones litio se cargan en 3 horas y 15 minutos en un enchufe estándar y en una hora menos si adquirimos la estación que ofrece la marca. El enchufe está colocado delante de la puerta del conductor, en la aleta. Aunque no completamente, las baterías también se recargan en marcha. A partir de programas específicos para la conducción eléctrica (Auto eDrive, Max eDrive o Save) se puede guardar carga por encima del 50% de capacidad de las baterías para ser utilizada más adelante en zonas más beneficiosas para un motor eléctrico, como por ejemplo la ciudad.
BMW 225xe 2016
La variante híbrida enchufable del monovolumen Serie 2 Active Tourer, el primer tracción delantera de BMW, llega también en los primeros meses de 2016. A diferencia del 330e, en el 225xe el motor de combustión es de tres (y no cuatro) cilindros con 136 CV y está conectado a las ruedas delanteras y el cambio automático es de seis (y no ocho) relaciones, mientras que la unidad eléctrica (de 88 CV) es la que mueve el eje posterior. La potencia máxima entre ambos motores es de 224 CV, obteniendo unas prestaciones notables (de 0 a 100 km/h en 6,7 segundos y de velocidad máxima los 202 km/h), y el consumo homologado entre 2 y 2,1 l/100 kilómetros en función del tamaño de los neumáticos.
La variante híbrida enchufable del monovolumen Serie 2 Active Tourer, el primer tracción delantera de BMW, llega también en los primeros meses de 2016. A diferencia del 330e, en el 225xe el motor de combustión es de tres (y no cuatro) cilindros con 136 CV y está conectado a las ruedas delanteras y el cambio automático es de seis (y no ocho) relaciones, mientras que la unidad eléctrica (de 88 CV) es la que mueve el eje posterior. La potencia máxima entre ambos motores es de 224 CV, obteniendo unas prestaciones notables (de 0 a 100 km/h en 6,7 segundos y de velocidad máxima los 202 km/h), y el consumo homologado entre 2 y 2,1 l/100 kilómetros en función del tamaño de los neumáticos.
Comparte con el 330e, los 40 kilómetros de autonomía eléctrica y los sistemas de recarga de las baterías, así como los programas de conducción para optimizar la carga de éstas, pero a diferencia de la berlina, el monovolumen mantiene intacto el tamaño del maletero: 400 litros.
En ambos modelos es común el sistema BMW ConnectedDrive para conocer el nivel de carga, gestionar o programar la climatización, ya no sólo desde dentro del coche, también vía smartphone. Además de la conectividad, el sistema de navegación también se pone al servicio de la eficiencia, y es que a partir de los datos de una ruta seleccionada, el navegador pondera los desniveles del trazado, los límites de velocidad permitidos y la información del tráfico para calcular en qué momento es preferible funcionar sólo en modo eléctrico.