75 aniversario roadsters BMW
Los primeros modelos
Cuando alcanzaron semejantes éxitos, tanto pilotos como la compaa pronto empezaron a perseguir un nuevo reto: un autom?vil en la prestigiosa categoría de hasta dos litros de cilindrada. Así que es lógico que se lanzara al mercado a finales de 1934 otra versión del BMW Roadster, aún más potente: el 319/1. De aspecto idéntico al BMW 315/1 con la excepción de la ventilación en el vano del motor, el BMW 319/1 estaba impulsado por un motor de 1,9 litros que alcanzaba los 55 cv gracias a su mayor cilindrada y a sus tres carburadores verticales más grandes, lo que le permitía llegar a 135 km/h de velocidad punta. La producción desde 1934 hasta 1936 sólo sumó 178 unidades, con un BMW 319/1 que consiguió unos éxitos sobresalientes en competición.
A mediados de los años 30, la producción de los descapotables biplaza y los automóviles de competición todavía era muy similar en términos técnicos, y la competición seguía siendo el lugar ideal para demostrar las prestaciones y la fiabilidad de un automóvil producido en serie. Pero para mantenerse en la competición, BMW enseguida tuvo que construir automóviles más potentes. Los ingenieros de BMW buscaron la forma de aumentar significativamente la potencia del motor sin aumentar su tamaño. Y encontraron la solución: el M328, el motor que impulsó al legendario deportivo BMW 328 en 1936. Desde el principio, con su debut en Nürburgring el 14 de junio de 1936, el nuevo descapotable biplaza de BMW literalmente pulverizó incluso a los competidores más potentes, equipados con motores sobrealimentados. Este extraordinario éxito se atribuye al gran equilibrio de la combinación de superior potencia del motor y la más moderna tecnología de las suspensiones que ha caracterizado a los descapotables biplaza de BMW hasta la actualidad: los 80 cv en su versión estándar y su bajo peso, de sólo 830 kg, le proporcionaban a este elegante descapotable unas prestaciones superiores, que siguen impresionando hoy en día.
periodistas y al público. El largo y esbelto compartimento del motor, el habitáculo perfectamente concebido para conductor y pasajero, la corta y musculosa parte trasera, las tendidas líneas laterales y sus curvas suavemente conformadas le proporcionaron a este automóvil un diseño absolutamente bello e intemporal.
Los comienzos de la Serie Z
Al comienzo del nuevo milenio, BMW presentó con orgullo un nuevo modelo muy especial: el BMW Z8. Dentro del compartimento del motor del BMW Z8 se encontraba el motor deportivo V8 de cinco litros de altas prestaciones, que rendía 400 cv. Combinado con una caja de cambios manual de seis velocidades, este supremo motor permitía al conductor disfrutar al máximo de las prestaciones en cualquier momento y bajo todas las circunstancias. De hecho, esta superioridad quedaba reflejada en unas cifras igualmente claras: los conductores más ambiciosos podían recorrer con el Z8 la variante norte del trazado de Nürburgring en el extraordinario tiempo de 8:15 minutos.
El último miembro de la familia de descapotables biplaza de BMW es el BMW Z4, presentado por primera vez en el Salón del Automóvil de París de 2002. Ahora desde primavera de 2009 se ofrece una reinterpretación con techo duro retractil de este modelo: el nuevo BMW Z4