Audi pone al día dos de sus motores más exitosos hasta la fecha, el 2.0 TDI y el 2.0 TFSI, para tres de sus principales bastiones de venta, el A4, el A5 y el Q5, con permiso de los más pequeños y modestos A1, Q3 y A3. De hecho fue en el compacto alemán en el que Audi estrenó el nuevo motor bloque turbodiésel de 2.0 TDI de 150 cv de potencia, también incluido en otros modelos del Grupo VAG (Seat León, Skoda Octavia o Volkswagen Golf). En ambos casos, Audi apuesta por una sensible mejora de la potencia y fundamentalmente por un salto cualitativo en lo que a eficiencia se refiere, cumpliendo con la normativa europea de gases anticontaminantes Euro VI (que entrará en vigor en 2014).
Empezando por el motor diésel, Audi habla de un motor nuevo, más refinado y suave de funcionamiento gracias a una reducción de la fricción y unos árboles de equilibrado alojados ahora sobre rodamientos, entre otros ajustes. Con estas premisas, el nuevo 2.0 TDI desarrolla 150 cv (antes rendía 143 cv) de potencia y un par motor máximo de 320 Nm entre 1.750 y 3.000 rpm. El consumo oficial se queda en unos interesantes 4,5 l/100 km en el A4 con caja manual de seis relaciones, un dato no muy alejado de su hermano pequeño el A3 (4,2 l/100 kilómetros) que ya es hijo de la nueva y más ligera plataforma modular MQB, algo que no ocurre con la berlina media de la marca. El nuevo motor diésel, más suave y refinado, rebaja sus consumos a 4,5 l/100 km
En cuanto al gasolina 2.0 TFSI, galardonado durante cinco años consecutivos como Mejor Motor del Año en su categoría, la potencia se ve considerablemente aumentada, pasando de los 211 cv de antes a los 225 cv de ahora y con un par motor constante de 350 Nm en un amplio régimen de utilización (entre 1.500 y 4.500 ‘vueltas’). Si no se puede hablar de un salto notable en las prestaciones -con el cambio manual de seis velocidades en el Audi A4, apenas mejora media décima en el sprint de 0 a 100 km/h- sí que el trabajo técnico -destacando una inyección indirecta adicional que complementa a la inyección directa FSI en régimen de carga parcial- nos permite hablar de una rebaja en consumos de un litro a los 100 kilómetros respecto al motor que sustituye, cumpliendo con la normativa Euro VI.En el gasolina, gracias a un sistema de inyeccion indirecta adicional, mas que caballos y prestaciones, la mejora llega de la mano de consumos: 1 litros menos que antes
Por lo tanto, desde ya mismo, Audi sustituye con estos nuevos motores 2.0 TDI de 150 cv y 2.0 TFSI a los anteriores 2.0 TDI de 143 cv y 2.0 TFSI de 225 cv, respectivamente, en los Audi A4 berlina y Avant, en el A4 Allroad, en los A5 Coupé, A5 Sportback y A5 Cabrio, así como en el Audi Q5, para el cual la nueva motorización diésel estará disponible tanto en las versiones de tracción simple como en las de tracción Quattro.