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EQUILIBRIO PERFECTO
En su 25 aniversario, el nuevo Ford Fiesta no podía dejar pasar la ocasión de exhibirse como el vehículo más equilibrado de cuantos polivalentes han surcado las carreteras, presentándose como la nueva referencia de su segmento.
Amplio, bonito y armonioso, el nuevo Ford Fiesta se sitúa a la cabeza de los superpolivalentes de su categoría, con 3,9 m de largo y una habitabilidad a la altura de la de los compactos medios del segmento superior. Ello se debe al estreno de una plataforma más grande, que le convierte en el rey en habitabilidad de su categoría.
Con la primavera, Ford presenta en el mercado este nuevo Fiesta que hace honor a su nombre al concentrar al máximo sobre sí no sólo espacio útil, estilo, funcionalidad, seguridad y calidad de conducción, sino también alegría y diversión, conjugando agilidad, dinamismo y comodidad para demostrar que lo práctico y lo útil no están reñidos con la brillantez de prestaciones y el disfrute de la conducción. Así, aprovechando sus 25 años en el mercado, Ford lanza esta quinta generación Fiesta para celebrar sus bodas de plata, tras una completa renovación en la que destaca una ganancia neta en habitabilidad, maletero, confort y comportamiento dinámico.
ESTILO NEW EDGE DE FORD
Más sólido y grande, más ancho, alto y largo, el mejor Ford Fiesta conocido hasta la fecha estrena una nueva plataforma con 2,49 m de batalla (4 cm más que el anterior) y una longitud total de 3,92 m, con un notable aumento de vías (5 cm más delante y 7 cm detrás). Sin embargo sus proporciones se mantienen muy equilibradas, sin exagerar la altura (de 1,46 a 1,43 m según carga), mejorando sus cotas internas en todos los órdenes. Así, el espacio para piernas y en altura para las plazas traseras ha mejorado notablemente al tiempo que el maletero aumenta su volumen útil hasta los 284 litros casi 40 más que la media de su segmento.
Su diseño se inspira en el estilo New Edge de Ford, tal y como lo iniciara el Focus siendo el primer producto de una nueva generación de vehículos utilitarios, que se compondrá de cuatro modelos que verán la luz entre este año y el que viene, entre los que se encuentra un descapotable, el StreetKa, y el interesante Fusion. Un diseño limpio y sencillo que representa, en palabras de Chris Bird, director europeo de diseño de la marca del óvalo, ‘la simplificación conceptual del estilo New Edge’.
El aire de familia con el Focus se aprecia en todo el diseño de la carrocería, tanto en el frontal como en la zaga, y como en los laterales con unas estilizadas lunas de custodia en la versión 5 puertas -única de momento- que aumentan su luminosidad. En el frontal destaca su capó corto con dos nervaduras longitudinales así como unos grandes grupos ópticos trapezoidales con los intermitentes por encima de los faros integrados en un conjunto de tapas semitransparentes. Además de la estrecha toma de aire bajo el capó, que va de faro a faro y refuerza la impresión de anchura, el nuevo Fiesta cuenta con una toma principal tallada en el paragolpes, de forma rectangular y con los antinieblas triangulares separados en los extremos.
Por detrás, los pilotos se han situado verticalmente en la parte superior de los montantes bajando hasta la cintura central, flanqueando el portón que se abre a ras de paragolpes ofreciendo un plano de carga muy bajo. El elementos de las torretas de los amortiguadores, lo que unido a su mayor altura y profundidad dan maletero es ahora 7 cm más ancho gracias a la recolocación de los esa nueva capacidad récord de casi 300 litros, ampliables mediante el abatimiento de los asientos traseros, y sobre todo con unas formas cúbicas muy aprovechables. Los pasos de rueda se marcan ahora notoriamente, como en el Focus, el parabrisas es mayor y más inclinado y el techo es ahora más oval, con un arco lateral más marcado que dibuja un suave descenso desde el montante central hacia atrás. En definitiva, un diseño muy equilibrado, elegante y bonito.
PARA ESTAR A GUSTO
Pero es por dentro donde mejor se aprecia el salto cualitativo del nuevo Ford Fiesta. La amplitud delantera evoca la del Focus, y detrás se ha logrado una ganancia sustancial en espacio para piernas y en altura al techo, superior incluso a modelos compactos del nivel superior (según los técnicos de Ford hay la misma altura al techo que en la última fila de asientos de un Galaxy que ya es decir). Y eso que los asientos son más altos (4,5 cm más delante) para tener un mejor dominio de la carretera. El salpicadero, de sobrio diseño, es muy funcional y ergonómico, con 4 grandes aireadores circulares de gran efectividad, (dos en el centro y dos en los extremos), con un bonito acabado bicolor y múltiples huecos portaobjetos (además de una gran guantera), y todos los mandos al alcance de la mano.
El cuadro de instrumentos combina los relojes analógicos del velocímetro y el cuentarrevoluciones con los indicadores de cristal líquido (LCD) para el nivel de combustible y temperatura del motor, además de contar con 18 testigos indicadores luminosos. Como opción hay un equipo de radio con lector CD, que permite la carga de hasta 6 CD’s, y el conjunto del cableado se ha reducido un 40%. Los apoyacabezas traseros se integran en el respaldo cuando no se usan, para mejorar la visibilidad por la luneta trasera, facilitando además el plegado de los asientos. En definitiva, detalles de racionalidad inteligente destinados a hacer más cómodo y grato el uso del automóvil, como el hecho de haber pensado el maletero para que quepan dos maletas grandes o una sillita de niño sin plegar.
Seguridad
LA SEGURIDAD POR ENCIMA DE TODO
Como ya es tradición en Ford, uno de los aspectos en que más ha mejorado la carrocería del nuevo Fiesta es en su rigidez, que ha ganado nada menos que un 100% en su resistencia a la deformación por impacto y un 40% en su resistencia a la torsión. Para obtener tal mejora ha habido que recurrir en su proceso de fabricación al empleo de acero de alta resistencia con soldaduras láser de espesor variable. La mayor resistencia a la torsión se traduce en un mayor confort y una mejor estabilidad dinámica, mientras que la mayor rigidez del habitáculo ha permitido una total eficacia en la protección de los ocupantes. Todo ello constituye la mejor base de partida en la consecución de su equilibrio dinámico general.
Igualmente se ha estudiado a fondo el diseño de las zonas de absorción de energía en caso de choque, dirigiendo la misma tanto por el suelo como por el techo, a través del capó y los pilares frontales. También se han reforzado los costados para lograr una mayor protección ante los impactos laterales, mediante una sólida viga de acero conformada en frío. Un trabajo que ha permitido al nuevo Ford Fiesta obtener una calificación de 4 estrellas -la máxima de su nivel- en el test de seguridad Euro NCAP. A todo ello se añade el Sistema de Protección Inteligente (IPS) desarrollado por Ford, con airbags frontales de apertura diferenciada en dos tiempos (de serie en toda la gama) y airbags laterales y de cabeza -de cortina, protegiendo tanto a los ocupantes delanteros como traseros-, ya en opción o según los diversos niveles de acabado. Además en el IPS se incluyen los cinturones con pretensor y limitador de esfuerzo, el pedalier plegable, la columna de dirección plegable (hasta 75 cm), etc, etc. Nada se ha olvidado y nada se ha dejado al azar.
Suspensiones
SUSPENSION MEJORADA
En las suspensiones, el nuevo Ford Fiesta recurre a adoptar las soluciones dinámicas más eficaces y probadas del momento, sin olvidar el confort. Así, el tren delantero mantiene el esquema independiente Mac Pherson, anclado junto con la dirección a un subchasis rígido atornillado a la estructura principal del bastidor. Los muelles son desalineados para una mejor compensación lateral de cargas, y detrás adopta un nuevo eje semitorsional que ha permitido un diseño muy plano de la suspensión trasera, con una gran robustez estructural, junto a un mayor recorrido útil de los movimientos verticales de las ruedas. El eje torsional es de perfil en ‘U’, que no sólo permite mejorar su eficacia sino aligerar peso; el centro de gravedad es más bajo que en el anterior Fiesta, y los brazos tubulares son de mayor diámetro, con codos reforzados, que mejora en un 38% su rigidez de caída y en un 27% la variación de convergencia/divergencia en las frenadas, además de aumentar un 30% la capacidad de absorción longitudinal.
Con una amortiguación monotubo que apenas invade el compartimento del maletero, el eje trasero del nuevo Fiesta mejora sensiblemente la comodidad y el agarre en curva reduciendo el balanceo sin endurecer su acción, lo que asegura en toda circunstancia un comportamiento absolutamente sano y seguro, en el que se conjuga confort de marcha y efectividad, absorbiendo muy bien las irregularidades del terreno. Lo mismo puede decirse de sus frenos, con discos delanteros ventilados de 258 mm de diámetro y tambores traseros de 203 mm, para favorecer su progresividad, dotados de un nuevo servofreno de 9 pulgadas que hace más suave su aplicación, con la ayuda de un ABS de serie en todas las versiones. La dirección es del tipo electrohidráulico, de gran precisión, que a su gran suavidad añade la transmisión de un especial agrado de conducción al volante, ya que, como afirma Martin Leach, vicepresidente de Desarrollo de Producto de Ford Europa, ‘es difícil disfrutar de un coche pequeño si no ofrece la máxima comodidad al conductor y los pasajeros’.
MECANICAS DE VANGUARDIA
En lo relativo a los motores, el nuevo Ford Fiesta nace con una amplia oferta que incluye de entrada cuatro motorizaciones de gasolina y una diesel. Las primeras se reparten en los nuevos bloques Duratec, los 1.4 y 1.6 de 16 válvulas (de alta compresión, 11:1, y totalmente de aleación -bloque y culata-) que rinden respectivamente 80 y 100 CV de potencia, con un par máximo de 12,6 mkg y 14,9 mkg cada uno (a 3.500 y 4.000 rpm), unas mecánicas muy brillantes con inyección multipunto secuencial y acelerador electrónico que permiten al nuevo Fiesta unas prestaciones muy ágiles (168 y 185 km/h de velocidad punta cada uno, con una aceleración de 0-100 km/h de 13,2 y 10,6 segundos respectivamente), y unos bajos consumos combinados de 6,3 y 6,6 litros/100 km cada uno.
Pero además de estos propulsores biárbol de 16 válvulas, Ford propone otra opción con un motor 1.3 monoárbol de 8 válvulas, sucesor del antiguo Endura, pero ahora con culata de aleación y árbol de levas en cabeza movido por cadena. Este Duratec 8V tiene también una compresión bastante alta (10,2:1) garantía de alto rendimiento y bajo consumo, y extrae a sus 1.297 cc 70 CV de potencia, con un par de 10,8 mkg (a un régimen bastante bajo de 2.800 rpm). Es un motor de mínima fricción pensado para ofrecer el menor consumo en gasolina con unas prestaciones más que dignas, jugando con la dosificación de su rendimiento a través de su centralita electrónica de gestión del motor (ECU).
Finalmente, la estrella motriz del nuevo Fiesta es su nuevo motor turbodiesel de inyección directa ‘common rail’, el 1.4 Duratorq TDCi, que extrae 68 CV de sus 1.398 cc, con un par máximo de 16,3 mkg a 2.000 rpm. Un motor de aluminio ligero y brillante con el que el Fiesta 1.4 TDCi logra un rendimiento dinámico similar al del 1.4 16V con un consumo mínimo que en el promedio combinado se queda en 4,1 litros/100 km.
Conclusiones
EL FIESTA DE LA MADUREZ
En definitiva, este nuevo Ford Fiesta es mucho más que una nueva generación de un turismo polivalente de reconocida y acreditada aceptación. Es un nuevo concepto de automóvil práctico y bello, el resultado de un cuarto de siglo de evolución plasmado en un coche distinto, ejemplo de armonía y equilibrio, un coche que hereda el estilo del Ford Focus adaptado a su categoría y que alcanza su plena madurez como producto. Un polivalente amplio y espacioso, silencioso, seguro y confortable, con un diseño moderno pero sin estridencias, que a partir de ahora va a servir de referencia dentro de su segmento para todos los superutilitarios que reivindiquen funcionalidad, seguridad y prestaciones, dentro de un placer de conducción y un confort al nivel de los turismos compactos del segmento superior. Un modelo que, como afirma David W. Thursfield, presidente de Ford Europa, ‘demuestra nuestro compromiso con el público en el segmento de los coches pequeños y confirma el éxito de nuestra transformación en Europa’.