Range Rover L 2014
Tras 20 años sin comercializarse, Land Rover recupera la variante de batalla larga para su todoterreno grande y de lujo: el Range Rover. Una vez puesta en órbita la cuarta generación del TT británico, 420 kg más ligera y con una versión híbrida, el Range Rover se venderá a partir de marzo de 2014 con una variante de batalla larga (L). El Range Rover que actualmente se vende ofrece una longitud de cinco metros y una batalla (distancia entre ejes) que roza los tres metros (2,92 metros). El Range L alcanzaría los 5,20 metros de largo, 20 cm más que la versión normal, y ofrecería una distancia entre ejes también mayor, superando los tres metros, quedando por encima de sus teóricos rivales Mercedes GL (3,08 m) y Audi Q7 (3,00 m), aunque todavía sin precisar cuánto.
Land Rover tampoco aclara los mercados en los que se lanzará. Aunque puede valer como declaración de intenciones el lugar en el que se presentará: el Salón de Dubai (5-9 noviembre), donde los visitantes son jeques que buscan un automóvil hecho a su medida: capaz para el desierto, lujoso para sus vidas de marajá. Y es que la marca perteneciente al grupo indio TATA habla del automóvil más lujoso jamás construido: con un habitáculo interior recubierto de aplicaciones en madera y piel de primera calidad gracias al nuevo nivel de acabado tope de gama ‘Autobiography Black’ que también incluye unas exclusivas llantas de 21 ó 22 pulgadas de diámetro.Alcanzará los 5,20 metros de largo y extraerá 14 centímetros más de espacio en la fila trasera
Esta variante Range Rover L 2014 se podrá asociar a todos los acabados disponibles en la actual gama –HSE, Vogue, Vogue HSE, Autobiography– y también al nuevo Autobiography Black. La principal diferencia en el habitáculo de este Range Rover L con el Range Rover normal será la ganancia de 14 centímetros de espacio para que los ocupantes traseros estiren sus piernas. Además, disfrutarán de dos butacones independientes, separados entre sí por una consola central terminada en madera y donde entre otras funciones se podrá ajustar la disposición del asiento, con especial importancia del ángulo de reclinación de los respaldos hasta los 17 grados. Y, claro, como el asunto va de jeques, el techo panorámico para ver las estrellas del desierto no podía faltar, como tampoco las cortinillas automáticas en las ventanas traseras para pasar desapercibidos cuando a uno se le antoje.
