Citroën C3 Picasso HDi

Los coches ya no son como los de antes. Día a día podemos observar que el concepto del automóvil está cambiando a gran velocidad, como demuestran las últimas creaciones de las marcas más punteras en todos los segmentos, desarrollando vehículos con un estilo vanguardista muy particular, combinando estéticamente rasgos de distinto tipo de segmento, algo a medio camino entre turismos familiares, monovolúmenes y SUV y dotándolos de una funcionalidad para los pasajeros inédita que nunca antes se había tenido tan en cuenta.

Los franceses de Citroën, en los últimos tiempos visionarios en lo que se refiere a diseño y tecnología, ha presentado recientemente su interpretación de la máxima expresión de la vanguardia en el diseño de los utilitarios compactos con el nuevo C3 Picasso que ahora probamos, dotándolo de la línea iniciada por todos los modelos Picasso de la familia y de sus mejores cualidades, donde en su día militaron modelos como el Xsara Picasso, y ahora lo hacen el el C4 Picasso de 5 y 7 plazas. El C3 Picasso nace como una solución de espacio dirigido principalmente a usuarios urbanos del automóvil, que requieren espacio para transportar tanto todo tipo de objetos o a los miembros de su familia, eso sí limitada a cinco personas.

La característica principal del C3 Picasso es que consigue en unas dimensiones exteriores ligeramente recatadas, que supera por poco los 4 metros, envueltas en un diseño muy jovial y llamativo, una habitabilidad interior sorprendente que brinda a los pasajeros un confort óptimo, una visibilidad extraordinaria con una inmensa superficie acristalada, ofreciendo además un comportamiento dinámico más propio de un turismo que de un monovolumen con posibilidades de rutero y todo a un precio relativamente accesible, que para nuestra versión más lujosa Exclusive con motor 1.6 HDI de 110 cv es de 20.150 euros, con un equipamiento muy completo. Como rival directo sólo encontramos uno, el nuevo Kia Soul, que se ofrece por un precio algo inferior con un motor diésel más potente, pero también tiene una presentación interior bastante más sencilla. Como contendientes en el mismo segmento encontramos al Nissan Note, al Mercedes Clase A, al Lancia Musa, al Seat Altea o al Skoda Roomster.

Los últimos modelos de Citroën suponen históricamente una apuesta arriesgada en materia de diseño, aunque siempre les ha funcionado bien, y con este C3 Picasso a pesar de su original y extravagante diseño que genera opiniones enfrentadas seguro que también logra calar bien entre el público. Combina magistralmente en su carrocería las formas curvas y redondeadas para conseguir una línea liviana y no muy pesada con apariencia de cubo. Destacan los rasgos generales exteriores con aspecto de todoterreno en unas dimensiones de utilitario, con un frontal muy elevado, los paragolpes abombados protegidos por molduras en las esquinas de color negro y unos modernos grupos ópticos trapezoidales con los intermitentes naranjas integrados de estilo familiar que invaden las aletas delanteras. La zaga es otra zona diferenciadora, con un portón grande que se extiende hasta el paragolpes trasero para facilitar la tarea decarga y flanqueado por unos faros verticales con un fondo negro muy original. Como buen minimonovolumen, una de las características fundamentales de este C3 Picasso son sus grandes puertas de acceso a los pasajeros, así como su gran portón trasero, acompañadas todas de una superficie acristalada inmensa que conceden una gran visibilidad y luminosidad. La silueta lateral está marcada por una dinámica forma de cubo sin aristas, coronado por la zona superior por las útiles barras de techo y por abajo por unas atractivas llantas de aleación de 17 pulgadas cromadas y negras de 4 brazos dobles.

Una panorámica del interior nos permite apreciar la perfecta adaptación del lema de la marca, Creative Technologies, con una apariencia muy futurista y ergonómica, tanto en el salpicadero realizado en dos niveles de diferentes ambientes y colores, como en los aireadores de ventilación con sugerentes formas hexagonales enmarcados en elegante cromo o el cuadro de mandos digital panorámico en la zona superior del salpicadero que se ilumina por LCD y ofrece datos como la velocidad, el nivel de gasolina, el de la temperatura del aceite, los datos del ordenador de a bordo y del sistema de audio. La zona inferior, integra la consola central inclinada y orientada al conductor donde se encuentran todos la palanca de cambio sobreelevada y los mandos de confort y seguridad como los sistemas de audio y climatización o el control de estabilidad y el de distancia de aparcamiento.

El amplio interior del C3 Picasso disfruta de una modularidad de asientos de récord para un vehículo de su tamaño, permitiendo priorizar el transporte de pasajeros hasta un máximo de cinco con un maletero de 500 litros o el transporte de objetos en unos extraordinarios 1.506 litros con los asientos abatidos. Además, los asientos de la segunda fila se pueden deslizar longitudinalmente hasta 150 mm. La postura de conducción es muy cómoda y fácil de encontrar, gracias a la cantidad de reglajes de los asientos ubicados en una posición muy alta que permiten un control absoluto de la carretera, y del volante en altura y profundidad. El habitáculo se ha diseñado como un espacio lleno de luz, gozando de una gran visibilidad y luminosidad gracias a su gran superficie acristalada de hasta 4,52 m2 con el techo solar panorámico opcional. En el C3 Picasso cabe de todo, sin ser demasiado grande.

El acabado más elevado Exclusive de nuestra unidad hace un importante despliegue de tecnología poco vista en el segmento entre su equipamiento de serie, con ABS y distribuidor electrónico de la frenada, control de estabilidad ESP, faros antiniebla, climatizador bizona, retrovisores eléctricos y retráctiles automáticamente, sensor de aparcamiento trasero, limitador y regulador de velocidad, asientos mixtos de tela, cuero y Alcántara y llantas de aluminio de 16 pulgadas, que en nuestra unidad con el Pack Image son de 17 pulgadas y se combinan con las molduras de los paragolpes en color negro y las barras del techo. Opcionalmente se puede acceder a pintura metalizada y a un navegador a color My Way con pantalla a color de 7 pulgadas y sistema de telefonía bluetooth.

Todos los propulsores que mueven al C3 Picasso, tanto gasolin como diésel, son muy ecológicos y poco bebedores de combustible, sobre todo el alto de gama en diésel que hoy probamos, el 1.6 HDi 16 vávulas con inyección directa por common rail y filtro de partículas FAP sin manteniemineto de serie que entrega 109 cv de potencia a 4.000 rpm y un consigue un elevado par motor de 240 Nm, (260 Nm con Overboost puntualmente) desde las 1.750 revoluciones. Gracias al filtro de partículas las emisiones contaminantes de CO2 se han quedado en unos reducidos 130 gr/km, lo que le permite el sello ecológico Airdream, y las cifras de consumo en sólo 5 litros a los 100 km en ciclo mixto. Las prestaciones por su parte son más que aceptables para un vehículo con su orientación familiar, alcanzando los 100 km/h desde parado en 11,2 segundos y una velocidad máxima de 183 km/h.

Para garantizar la máxima seguridad y el comportamiento más noble y similar al de un turismo, el C3 Picasso cuenta con un chasis de gran rigidez y un sistema de suspensión con sistema MacPherson delante y traviesa deformable detrás que consigue un gran compromiso entre confort y agilidad, obtenida también mediante una dirección asistida eléctrica con un radio de giro pequeño que optimiza la maniobrabilidad. Cierto es que en conducción rápida la carrocería se inclina un poco al entrar en curva, pero también lo es que es simplemente una percepción y que además no es un coche concebido para una conducción deportiva, aunque la fuerza de su motor pueda engañarnos.

En definitiva, es un coche con una gran polivalencia y un confort interior excelente en una carrocería discreta para movernos por la ciudad como pez en el agua, que combinado con un rápido y económico motor diésel de 110 cv y un equipamiento muy amplio de serie que se puede completar al máximo, hacen que los 20.000 euros que hay que pagar por él no resulten un exceso.