Vorsteiner BMW GTRS3
Con pinturas de guerra
Un preparador americano especializado en deportivos alemanes quizás no parece lo más habitual, pero pocas cosas son convencionales en el garaje de Vorsteiner, el conocido e icónico preparador afincado en California. Bajo el lema de la precisión, la innovación y sobre todo la perfección, nace el Vorsteiner BMW GTRS3, un super-deportivo que además de serlo, lo parece.
Potencia y rendimientoPara asegurarse un aumento contundente de la potencia, los ingenieros de Vorsteiner se han decantado por una solución contundente, la instalación de un sistema biturbo. Aunque puede que muchas de las virtudes del V8 de 4 litros del M3, como su increíble tacto y elasticidad, pueden verse disminuidas por la acción de los turbos, la potencia extra obtenida es tal, que los puntos en contra de las mecánicas de aspiración turbo pierden todo su peso.
En combinación con el nuevo sistema de escape de alto rendimiento, fabricado en titanio, y gracias también a una programación de la centralita a medida, el sistema biturbo permite extraer la escandalosa cifra de 629 CV, o lo que es lo mismo, 209 CV más que el M3 original.
Un aumento de potencia tan contundente, a pesar de las reconocidas virtudes del chasis del M3, hace necesario otro tipo de mejoras. Por eso el Vorsteiner GTRS3 ha sido dotado de una nueva suspensión deportiva, y unos frenos de más potencia, firmados por Brembo.
Tan radical como pareceCon una estética que haría parecer inofensivo al BMW M3 GTS, el Vorsteiner GTRS3 parece dispuesto a subirse a los pianos de cualquier circuito de velocidad. El modelo crece en envergadura con el kit de ensanchamiento de la carrocería, confeccionado enteramente en fibra de carbono, aumentando su estabilidad lateral, y obligando a los ingenieros a aumentar también la anchura de ejes sobre el M3 original.
Los colores escogidos para vestir a este GTRS3 bautizado como Canday Cane, resaltan el carácter racing de la preparación. El color blanco nieve contrasta no solo con los elementos en fibra de carbono, algunos de los cuales son accesorios originales como el techo, sino con el color rojo brillante que remarca las llantas, los espejos, las entradas de aire, y hasta el logotipo modificado de BMW.
No se puede negar, que aunque puede gustar más o menos, la combinación de colores escogida, con el rojo como protagonista absoluto del contraste, es un auténtico imán para las miradas. Las llantas, rojas por supuesto, rematan el trabajo de exterior, y con un tamaño de 20 pulgadas, se convierten en una de las piezas clave de la preparación. Calzadas con neumáticos Michelin Pilot Sport en medidas 285/25/20 en el eje delantero y 235/25/20 para el trasero, garantizan además un agarre excepcional.