La mitad de los conductores no quiere que se prohíban los detectores de radar
Son algunas de las conclusiones de un estudio del RACC sobre la opinión que tienen los automovilistas (han sido encuestados casi 2.600 conductores) sobre las nuevas tecnologías de ayuda a la conducción, con especial atención a los límites de velocidad.
Y es que hasta dónde pisar el acelerador y, sobre todo, cómo no ser ‘cazado’ por un radar figuran entre las principales inquietudes de los conductores, especialmente de aquellos que se ponen al volante de un coche deportivo o de una berlina, según ha destacado el director técnico del RACC, Luis Puerto.
Así, el 27,9 por ciento de los conductores admiten que usan avisadores de radar, elementos legales que están incluidos en navegadores o teléfonos inteligentes y que avisan de la ubicación de un radar fijo.
Un 2 por ciento reconoce que dispone de detectores de radares, también permitidos por el momento y que, dotados con antena, requieren de una instalación previa en el vehículo, aunque ya existen en el mercado portátiles.
El informe del RACC concluye que, aunque escaso, el uso de detectores se incrementa muy notablemente entre los conductores que admiten que circulan por encima de la velocidad permitida, hasta un 123 por ciento, así como que el empleo de estos dispositivos es mayor entre los hombres.
Uno de diez usuarios de coches deportivos confiesa que dispone de un detector de radar, mientras que casi cuatro de cada diez conductores de furgonetas son los que más usan avisadores.
Entre el 70 por ciento que dice no usar ninguno de estos elementos, casi la mitad señala que no los necesita, un 16 por ciento porque no quiere gastarse el dinero en ellos, un 14 por ciento argumenta que si los tuviera se distraerían de la conducción y otro 11 por ciento porque tiene dudas sobre su legalidad.
Precisamente, preguntados sobre si estos detectores deberían estar prohibidos en España como lo están en todo Europa salvo en el Reino Unido, un 51,7 por ciento no quiere que sean ilegales, porcentaje que se eleva al 63 y 60 por ciento entre los conductores de coches deportivos y berlinas, respectivamente.
El proyecto de reforma de la Ley de Tráfico, remitido por el Gobierno al Congreso para su debate, prohíbe el uso de detectores de radar, que será multado con 200 euros y tres puntos del carné.
Siete de cada diez conductores que usan estos dispositivos, según la encuesta del RACC, reconocen que han sido multados por exceso de velocidad.
Un 11 por ciento confiesa que ha recibido cuatro o más multas por superar los límites, porcentaje que se duplica, un 21,6 por ciento, entre los usuarios de detectores.
El estudio del RACC también pregunta sobre los límites de velocidad. Más de la mitad considera que los actuales son adecuados, pero que deberían aumentar en ciertas carreteras, algo que está en sintonía con el texto de la Ley de Tráfico propuesto que prevé elevar de 120 km/h a 130 km/h la velocidad en determinados tramos de autovías y autopistas.