Interior, abierto a estudiar una subida del límite de velocidad en las autovías
En sendas comparecencias celebradas desde enero en el Congreso y el Senado, Fernández Díaz ya ha avanzado que una de sus prioridades para la presente legislatura será combatir con firmeza la conducción bajo los efectos del alcohol o las drogas y el exceso de velocidad, así como otros comportamientos temerarios al volante.
En concreto, el titular de Interior ha anunciado la ampliación ‘en horario laboral’ de los controles de velocidad, alcohol y drogas y del uso cinturón de seguridad en las carreteras convencionales con el propósito de reducir la siniestralidad, especialmente en los viajes de trabajo o en los desplazamientos ‘in itinere’.
Un reto al que también se ha sumado la directora general de Tráfico, María Seguí, que ha recordado que el principal riesgo de salud laboral son precisamente los accidentes de circulación.
Otras de los objetivos que se ha fijado Interior es la renovación del parque de vehículos mediante reducciones impositivas a la compra de vehículos nuevos, así como extender la administración electrónica en todos los trámites con la DGT, mejorando la implantación de la Dirección Electrónica Vial.
En la comparecencia de hoy en el Congreso, se espera que Fernández Díaz también detalle algunos de los proyectos de la DGT para las vías de alta capacidad como los llamados ‘Sistemas Inteligentes de Transportes’, que mejoran la capacidad y la seguridad de las infraestructuras viarias.
Eliminar redundancias y mejorar la eficiencia y la transparencia en la gestión de la DGT es otro de los objetivos para los próximos cuatro años.
Precisamente, Tráfico ya está trabajando para afinar las estadísticas oficiales de siniestralidad de forma que se computen todas las víctimas mortales, tanto en ciudad como en carretera y a 30 días desde el siniestro.
Se trata, según ha asegurado la responsable de la DGT, María Seguí, de conocer con datos reales y no estimaciones, el número exacto de personas que resultan heridas en un accidente y después fallecen en el hospital, y que hasta ahora no estaban incluidas en los indicadores adelantados de siniestralidad.