El Salón de Ginebra, entre la eficiencia extrema y el radicalismo deportivo
La cita ginebrina ha comenzado hoy su andadura con una primera jornada exclusiva para los medios de comunicación en la que se concentra el mayor número de novedades de este Salón -son 130 las anunciadas- con la asistencia de más de 10.000 periodistas de todo el mundo.
La estrella de la eficiencia en esta edición, salvo ejemplos de propulsión de cero emisiones (eléctricos puros y de pila de combustible) está firmada por Volkswagen, al haber presentado la versión definitiva de producción del coche de 1 litro, una idea que se presentó ya hace algunos años y que ahora ha tomado forma en el XL1.
El objetivo inicial fue el de un litro de consumo de carburante, pero al final ha quedado en 0,83 litros, gracias, a un sistema de propulsión híbrida y enchufable, además de un diseño que no pasa desapercibido para acoger en una carrocería muy baja, a dos pasajeros, cuyo coeficiente aerodinámico (Cx) es de 0,18, cuando un automóvil de turismo pasa habitualmente del 0,30.
Y en el lado opuesto, Lamborghini firma el coche de producción probablemente más caro del Salón de Ginebra, el Veneno -es el nombre de un toro español- un bólido de diseño espacial construido en fibra de carbono con motor V12 de 750 caballos del que sólo se van a fabricar tres unidades, ya vendidas, a un precio cada uno de 3 millones de euros más el IVA.
Otro millonario, pero sólo la tercera parte que el Veneno, es el McLaren P1, un híbrido que vuela a más de 350 km/h, con un diseño más suave que ‘Lambo’.
En terrenos del mercado de gran consumo, la funcionalidad combinada con la eficiencia despejan la ecuación para un mercado, especialmente el europeo, que no termina de recuperarse.
Las berlinas familiares y los SUV o crossover de pequeño tamaño se imponente en Ginebra, con atractivos ejemplos para el comprador, como lo son el Skoda Octavia Combi, el Volkswagen Golf Variant y el Honda Civic Tourer, además del BMW Serie 3 Gran Turismo o la nueva Clase E Estte de Mercedes.
Entre los SUV de pequeño tamaño dominan el Peugeot 2008, el Renault Captur, derivado del nuevo Clio, y el Suzuki S-Cross, que es el llamado a sustituir al actual crossover SX4.
En propulsiones empiezan a dominar las que pasan por las soluciones híbridas como la que firma el grupo PSA a base de aire comprimido y también exhibida a bordo de un C3 para demostrar que es una tecnología que se puede ensamblar en cualquier tipo de automóvil.
En soluciones híbridas convencionales destaca la formulada por Subaru, que ha sorprendido con una combinación de su motor diesel de cilindros opuestos (boxer) con dos motores eléctricos para configurar un sistema de tracción 4×4. El sistema es enchufable y ofrece una autonomía de más de 60 kilómetros en uso de cero emisiones.
En todos los modelos expuestos en Ginebra destaca la preocupación de los fabricantes por las mejoras en seguridad, principalmente las basadas en la electrónica, al tiempo que en la conexión del automóvil con el entorno a través de ordenadores de a bordo y teléfonos inteligentes (smartphones).
En seguridad, Volvo es una marca pionera y ha vuelto a sorprender con un nuevo sistema, en este caso de detección de ciclistas asociado al de peatones.
El Salón del Automóvil de Ginebra contiene gran variedad de atractivos para los 700.000 visitantes que espera la organización, el 40 % procedente de países euros.