El beneficio de Renault cayó un 38,2 por ciento en 2011 hasta 2.092 millones de euros
Excluyendo esa plusvalía de 2.000 millones de euros por la venta de títulos de Volvo, Renault destacó en un comunicado la mejora de los principales elementos de su cuenta de resultados, empezando por las participaciones en los otros fabricantes con los que está asociado.
Esas participaciones en 2011 le reportaron 1.524 millones de euros, frente a los 1.289 millones que le habían supuesto un año antes, de los cuales 1.332 millones del japonés Nissan (1.084 millones en 2010), 136 millones del sueco Volvo (frente a 214 millones) y 49 millones del ruso AvtoVAZ (que le había sustraído 21 millones negativos en 2010).
El resultado de explotación de Renault prácticamente se duplicó el pasado año con 1.244 millones de euros, tras los 635 millones del ejercicio precedente y el margen operativo se mantuvo prácticamente estable: 1.091 millones de euros en lugar de 1.099 millones.
Teniendo en cuenta que la facturación aumentó un 9,4 % hasta 42.628 millones de euros, el margen operativo representó un 2,6 % de esa cifra, comparado con el 2,8 % que había supuesto en 2010.
En el negocio puramente automovilístico de Renault, el descenso del margen operativo fue algo más pronunciado, ya que quedó en 330 millones de euros, frente a los 396 millones del ejercicio precedente.
La compañía lo explicó por el aumento del precio de las materias primas, que tuvo un impacto de 509 millones de euros, a lo que se sumó un efecto desfavorable de las variaciones de tipo de cambio, evaluadas en 199 millones, y una reducción de los precios de venta de sus vehículos (por efecto de la competencia) que, en términos comparativos, le restó 245 millones de euros.
Además, los problemas de aprovisionamiento derivados del tsunami en Japón de marzo de 2011 le costaron 200 millones de euros en el conjunto de ejercicio.
Todo eso no pudo ser compensado por los 455 millones de euros suplementarios por el incremento de las ventas de vehículos y por las mejoras gracias al programa de costos bautizado ‘monozukuri’, que le reportó 500 millones.
Las ventas de vehículos del conjunto de marcas de Renault totalizaron 2,72 millones de unidades, una subida del 3,5 %.
La compañía francesa, que destacó el hecho de haber conseguido un flujo de caja operativo en el negocio automovilístico de 1.084 millones de euros, por encima del objetivo que se había fijado, también puso hincapié en que, en 2011, por tercer año consecutivo disminuyó su endeudamiento financiero para dejarlo en un nivel ‘históricamente bajo’ de 299 millones de euros a fecha de 31 de diciembre, 1.136 millones menos que un año antes.
Para 2012, Renault espera un flujo de caja operativo positivo en la división automovilística, con unos gastos a investigación y desarrollo inferiores al 9 % del volumen de negocio.
Su perspectiva sobre el mercado global del automóvil es que crecerá un 4 % respecto a 2011, pero con un notable contraste por regiones: la progresión será importante en algunos de los países emergentes donde tiene más presencia (+5 % en Brasil o +8 % en Rusia), mientras que en su mercado doméstico de Europa habrá un retroceso del 3 o 4 %. En su país de origen, Francia, espera un bajón del 7 a 8%.
Teniendo en cuenta esas proyecciones, el grupo del rombo espera continuar aumentando sus ventas, en línea con su plan para el horizonte de 2016.