Con motivo de la inminente comercialización de la versión definitiva del Prius Plug-In o enchufable, la última evolución del ecológico Prius hacia un mundo más eléctrico, Toyota nos ha permitido ponernos al volante de toda su gama híbrida, la más amplia del mercado, para demostrarnos lo diferentes que son cada uno de ellos a pesar de coincidir todos en una única premisa, ecológicos y económicos, reconfirmando además que disponen de la gama más amplia de híbridos llegando a cubrir el 65% de segmentos del mercado.
Tras tres exitosas generaciones de Prius, ésta última con una penetración en el mercado inimaginable hace unos años, con unas ventas en tan sólo tres años alrededor del mundo de un millón y medio de unidades, han extendido la tecnología híbrida Hybrid Sinergy Drive a varios modelos más, algunos derivados del mismo Prius y otros completamente distintos, como son el compacto Auris o el novedoso utilitario Yaris. Los que derivan del Prius son el Prius+, la respuesta de Prius a las necesidades de espacio de transporte de pasajeros con siete asientos, y el nuevo Prius Plug-In, resultante de la combinación de la conocida tecnología híbrida del Prius convencional, con un motor de gasolina y otro eléctrico en paralelo, con una nueva batería de ion-Litio de mayor capacidad que le permite rodar en eléctrico hasta 25 kilómetros y a unos 85 km/h, lo cual ahorra cantidad de combustible. Con el híbrido eléctrico enchufable tenemos un todo en uno, un eléctrico perfecto para los recorridos cortos aunque con una autonomía muy limitada, y un híbrido con motor de gasolina perfecto para trayectos más largos.
Ya en 2010 pudimos probar el los Prius Plug-in preserie que se testaron para comprobar el funcionamiento y utilidad de la combinación entre el motor eléctrico y el híbrido convencional, con los que 50 clientes realizaron hasta 40.000 kilómetros, de los que han resultado importantes mejoras en detalles de usabilidad para el modelo final: ahora permite la selección independiente entre el motor eléctrico para trayectos por ciudad o el híbrido para trayectos de larga distancia sin agotar la batería, lo que brinda mayor autonomía eléctrica, se consigue una mayor capacidad de maletero, hasta 443 litros y tan sólo dos litros menos que el Prius convencional, y se ha optimizado el almacenamiento del cable de carga y el punto de recarga en el vehículo que pasa a la zona trasera, facilitando también su uso. Pero lo más importante es que se ha reducido el peso de la batería en un 50%, dejando el peso total en 110 kilos menos que la preserie, con lo que también se ha reducido el consumo homologado hasta los 2,1 litros a los 100 km y se han rebajado las emisiones de CO2 hasta los 49 gr/km.El Prius Plug-In definitivo declara un impresionante consumo medio de 2,1 litros a los 100 km y unas emisiones de 49 gr/km
En definitiva, al volante el coche sorprende por su versatilidad de uso y sus buenas prestaciones, con una aceleración aún más contundente que su hermano simplemente híbrido y unos consumos muy reducidos, maximizando el uso del propulsor eléctrico durante más kilómetros y a velocidades mayores, de hasta 85 km/h. Ofrece tres modos de conducción, una híbrida con un límite de propulsión eléctrica de entre 5 y 13 kWh, otra exclusivamente eléctrica con una entrega de hasta 37,7 kWh y otra eléctrica para ciudad limitada a 25kWh para aumentar la autonomía de la batería.
La gama del Prius Plug-In se organiza en torno a los dos acabados altos de gama del Prius convencional: sólo figuran el acabado Advance y el Executive, añadiendo sobre el convencional en el primer caso 8.000 euros y en el segundo 10.000 euros, aunque el Advance incluye asientos calefactados de serie y el Executive el Pack Premium, con sistema de navegación Touch Pro, control de aparcamiento inteligente IPA, control de velocidad ACC y el sistema precolisión PCS, así como sustituye las llantas de 17 pulgadas por otras de 15 pulgadas de acero con tapacubos más aerodinámicas. Los precios son de 33.900 euros para el Plug-In Advance y de 41.500 euros para el Plug-In Executive.
A esto hay que descontarle 2.000 euros de bonificación que da el Estado por adquirir un vehículo híbrido.
Con todas estas novedades y evoluciones que está llevando a cabo Toyota con base en su propulsor HSD, pretende llegar a 2020 con versiones híbridas en todos los segmentos, incluso con nuevas tecnologías como la pila de combustible FCHV (Fuel Cell).
Respecto al resto de modelos hemos de decir que todos presumen de un diseño más atractivo que el de sus homónimos convencionales, como el Auris y el Yaris, que destacan notablemente por una suavidad de funcionamiento y unas prestaciones realmente inesperadas para un vehículo híbrido de estas características y de una economía de consumo y de una ecología, que hace plantearse la opción por el gran ahorro que permite y por lo cívico que resulta para el medioambiente.