El coqueto urbano de Fiat se descubre
En Italia Fiat ya ha comenzado las ventas del 500 descapotable, y en el resto de mercados el coqueto urbano descubierto llegará en unas semanas. En su país de origen cuesta unos 3.500 euros más que el Fiat 500 normal, por lo que si se mantiene la misma equivalencia en España su precio estará comprendido entre 16.000 y 20.000 euros aproximadamente. En ese momento se convertirá en el rival más directo del Mini Cabrio, aunque de forma más indirecta podría enfrentase a ‘los techo duro’ tales como Peugeot 207 CC, Opel Tigra o Nissan Micra. La característica más diferenciadora del Fiat 500 C ya no es sólo que su capota sea de lona, sino que además es corrediza a través de una estructura de montantes laterales fijos. No obstante, sí se puede llamar descapotable y no ‘cerrado con techo practicable’, ya que la apertura de este techo (que se ha realizado así en honor al modelo de 1957) llega hasta la tapa del maletero. Evidentemente esta ha cambiado radicalmente, y en lugar del portón trasero se recurre a una tapa que se abre mediante bisagras de paralelogramo. Lo mejor es que su capacidad de carga de maletero permanece prácticamente invariable (182 litros frente a los 185 litros del modelo convencional).
Esta capota de lona es de accionamiento eléctrico, y se puede manipular en marcha hasta una velocidad de 60 km/h. Consta de una luneta de cristal y tercera luz de freno, y está disponible en tres colores: marfil, rojo y negro. Su habitáculo conserva espacio para cuatro ocupantes, ya que la carrocería tiene las mismas medidas: 3,55 metros de largo, 1,65 metros de ancho y 1,49 metros de alto.
A falta de conocer las versiones exactas que se comercialicen en España, en Italia el Fiat 500 C se ofrece con las mismas mecánicas que el modelo cerrado y niveles de equipamiento similares; con un sobreprecio de unos 3.500 euros. En prestaciones este nuevo Fiat 500 abierto apenas se ve penalizado, gracias a la ligereza de su sistema de techo de lona. De hecho, tanto los motores de gasolina 1.2 de 69 cv y 1.4 de 100 cv como el diésel 1.3 de 75 cv mantienen las mismas cifras de velocidad y consumo, y sólo se ven penalizados los 500 C por unas pocas décimas en el registro de 0 a 100 km/h. Lo mismo sucede con las cifras de emisiones, muy bajas en todas las versiones, por debajo de los 120 g/km en la mayoría de las versiones.
El Fiat 500 C diésel tiene un consumo de 4,2 l/100 km y unas emisiones de CO2 de 110 g/km, mientras que los modelos de gasolina varían en función a si el cambio es manual o Dualogic, o si incorporan el sistema Start&Stop que apaga el motor cuando el coche se detiene.