Un uso adecuado del coche puede ahorrar 500 euros al año en combustible
Arval alude a una serie de consejos destinados a ahorrar combustible justo en el momento que este artículo se ha colocado en los precios de venta más altos de la historia con el referente de los 70 euros que supone llenar un depósito medio de 55 litros, es decir diez euros más que hace un año.
Los consejos de Arval se ciñen a un arranque del vehículo sin acelerar, el uso de marchas largas con las transiciones de los cambios entre 2.000 y 2.500 revoluciones para la gasolina y los 1.500 y 2000, en el diesel.
También recomienda un empleo correcto de la transmisión, de modo que la primera velocidad se utiliza para arrancar, la segunda recorridos seis metros desde la puesta en marcha, la tercera a partir de 30 km/h; la cuarta a partir de 40 y la quinta algo por encima de 50.
A esta recomendaciones se une mantener la velocidad de circulación lo más uniforme posible, evitando frenazos bruscos y se recuerda que pasar de 100 a 120 km/h supone aumentar el consumo de carburante un 44 %.
Aconseja evitar en lo posible el punto muerto, pues en esta situación se consume hasta medio litro por hora, por lo que la opción es una marcha larga y dejar que el automóvil ruede con ella sin acelerar.
El apagado del motor en paradas prolongadas puede implicar un ahorro de hasta 150 euros al año
No es conveniente cargar el vehículo en exceso, ni tampoco exceder el ‘aforo’ del vehículo, pues por cada 100 kilogramos de peso adicional el consumo de combustible se incrementa un 5 %.
Si no se va utilizar la baca, es recomendable retirarla, ya que llevarla vacía aumenta el gasto de carburante un 2 %.
El uso ideal del aire acondicionado es el funcionamiento a una temperatura programada entre 22 y 23 grados, pues un uso irracional puede incrementar el consumo de combustible hasta un 20 %.
Asimismo, las ventanillas totalmente bajadas, si se circula a más de 100 kilómetros por hora, causan un gasto adicional del 5 %.
Los neumáticos desinflados y un filtro de aire sucio aumentan un 6 % el consumo, mientras que unas bujías sucias lo elevan hasta un 10 %, según la fuente.