La marca de lujo japonesa vuelve a ser el referente en tecnología con el híbrido más potente construído hasta ahora. ¡Teníamos ganas de conocer de primera mano el Lexus GS 450h! Una berlina concebida al detalle para deleitar allá por donde pasa.
Ya probamos su hermano menor, el GS 300, con el que quedamos plenamente encantados. ¿Te imaginas algo mejor? Nosotros pensábamos que sólo Lexus podía igualar tan alto listón, y no sólo ha sido así sino que se han superado a sí mismos. El GS 450h consigue el más difícil todavía gracias a un evolucionado sistema que combina dos motores, uno de gasolina y otro eléctrico, que tienen un solo fin: hacer de su conductor el más especial de la carretera.
Por diseño, el modelo nipón se desmarca del resto de sus competidores más clásicos; los alemanes Audi A6, BMW Serie 5 y Mercedes Clase E, y el Volvo S80. Nuestro lujoso protagonista está más cerca del coupé de cuatro puertas Mercedes CLS y del nuevo rival británico a tener en cuenta, el Jaguar XF, que comparte evidentes similitudes con este ejecutivo oriental.
Hace casi ya dos años que nos pusimos al volante del GS, y por aquel entonces la marca pretendía entrar en España como alternativa a las premium. Hoy, decir Lexus no implica caras de desconocimiento, aun sin llegar a las cifras de ventas de las casas alemanas. Más bien se posiciona como una alternativa, al igual que Volvo o Jaguar, pero con la tecnología de vanguardia unida a la calidad suprema como seña de identidad.
Agradecimientos a la Universidad Antonio de Nebrija por dejarnos disfrutar de su entorno natural.
El Lexus GS 450h mantiene el diseño del resto de la gama GS, basado en las líneas ‘L-Finesse’ fluídas y elegantes que aportan al conjunto un descarado dinamismo, y disimulan la caída de la trasera como si de un coupé se tratase.
Esta versión más respetuosa con el medio ambiente, se distingue del resto por el anagrama HYBRID en los faldones laterales -bajo las puertas traseras–. Por lo demás los casi 5 metros de la carrocería no varían y mantienen la imagen sport conocida hasta ahora, con unas llantas de 18 pulgadas montadas sobre las cubiertas de 245/40.
Dentro el cuero y la madera ensalzan el carácter elegante y distinguido de nuestro protagonista. La disposición de los mandos, la consola central con la pantalla LCD táctil y la comodidad e insonorización envidiables de este nipón, sólo pueden decantar la balanza a su favor.
Los pasajeros viajarán sin protestar, aunque el encargado de meter el equipaje en el maletero puede que no lo lleve tan bién por culpa de sus 280 litros de capacidad útiles. Sí, sólo 280 porque se aprovecha parte del hueco de otros GS para alojar el sistema eléctrico -motor, baterías, etc-. Asi que si piensas en este híbrido como si fuese una berlina grande más, cambia el chip.
Los pasajeros viajarán sin protestar, aunque el encargado de meter el equipaje en el maletero puede que no lo lleve tan bién por culpa de sus 280 litros de capacidad útiles. Sí, sólo 280 porque se aprovecha parte del hueco de otros GS para alojar el sistema eléctrico -motor, baterías, etc-. Asi que si piensas en este híbrido como si fuese una berlina grande más, cambia el chip.
Entre el equipamiento encontramos los controles de estabilidad, tracción y de ayuda a la frenada que interactúan en las situaciones límites, gestionados por un sistema global, el VDIM, que se ajusta a las necesidades del conductor, según el firme por el que circula y su ritmo al volante. Tampoco nos olvidamos del sistema de precolisión, ni del de control de crucero adaptativo por radar o de la cámara trasera. A todo esto hay que añadir la susspensión neumática adaptativa, un equipo multimedia con 14 altavoces Mark&Levinson y los 10 airbags distribuidos por el habitáculo.
El acabado President probado viene con todas esos automatismos que te encantará enseñar y te harán el conductor más orgulloso de la carretera.
Nos disponemos a arranacar el Lexus GS 450h. Presionamos el botón situado a la derecha del volante y los dos motores de este híbrido están listos para prestarnos toda su potencia. Hasta aquí todo normal, un coche ecológico como este dispone de dos motores para reducir las emisiones de dióxido de carbono, pero además ¡tampoco contamina acústicamente!
De parado a estar en marcha nuestro oído no percibe diferencias. Esto cambia, si al arrancar, las baterías están bajo mínimos. Entonces el motor de gasolina entra en funcionamiento en el acto y las baterías se recargan al soltar el acelerador -manteniendo la inercia del coche- o al pisar el freno, pero aún así la insonorización es realmente sorprendente. El funcionamiento de su mecánica es extremadamente suave y progresivo. En ciudad no es tan aparatoso como aparenta por sus cotas –4.850 mm de largo, 1.820 de ancho y 1.430 mm de alto- y se desenvuelve sigilosamente entre el tráfico.
Cuando pasamos de 50 km/h el GS saca su genio verde y empieza a empujar con los dos motores que nos propulsan -tracción trasera-, engranando las 6 velocidades de su caja de cambios automática con modo secuencial. El 450h ofrece 345 cv de potencia por el trabajo combinado de sus dos motores: un gasolina V6 de 3.5 litros que con un nuevo sistema de inyección directa doble da 296 cv y 368 Nm de par motor, y un motor eléctrico que rinde 200 cv y 275 Nm. Ambos convierten a este híbrido en el más potente del mundo, capaz de alcanzar los 100 km/h en 5,9 segundos y una velocidad máxima de 250 km/h. Y todo con un consumo mixto a los 100 km de 7,9 litros, datos oficiales que no se correspondieron con los obtenidos durante nuestra prueba -por el ordenador de viaje- que no bajó de 9 litros a ritmos altos, no superiores a los límites legales.
Los que buscan un rendimiento más agresivo, ya en carretera, disponen del programa Hybrid Power -y también Snow para nieve y hielo- junto con el Sport de la suspensión adaptativa que hacen del H una berlina muy deportiva de emociones ecológicas, dejando de lado sus 1.865 kg de peso. La respuesta del acelerador gana inmediatez y los cambios de apoyo de la carrocería se vuelven contundentes sin que se resienta la espalda. Y lo más importante, con la seguridad alerta gracias al VDIM que espera en la sombra para cualquier corrección sin hacernos perder la sensación de ir sobre raíles. El sonido -sin exageraciones- de los dos motores se percibe agudo.
Sabemos que este Lexus híbrido no es un deportivo puro, aunque muestra genio y unas cualidades de chasis notables para disfrutar cada curva de un puerto de montaña. En este caso el modo secuencial nos deja un poco fríos, ya que el acelerador manda sobre la palanca del cambio. Si por el contrario, eres un conductor tranquilo disfrutarás del silencio en estado puro y de los cambios de marcha casi inexistentes. Y si utilizas el control de crucero, podrás olvidarte de todo, menos del volante.
72.380 euros habrá que desembolsar para llevárselo al garaje. Recuerda que es el híbrido más potente del mundo, y la fama tiene un precio.