Un SUV muy capaz
Ante la excelente aceptación de los denominados SUV compactos, muchas marcas –algunas con tradición en todoterrenos y otras no- han optado por lanzar modelos con tracción 4×4 pero con una tecnología y unas cotas más bien orientadas al asfalto. Tanto es así, que han llegado a ser prácticamente modelos de carretera, con la única ventaja de tener un poco más de distancia libre al suelo, la citada tracción total y poco más. Es decir, válidos para caminos en no muy mal estado y superficies resbaladizas pero tampoco muy complicadas.
a favorCapacidad interior.Alta tecnología 4×4.Motores diésel eficaces.en contraEstética muy ‘cuadrada’.Opciones mecánicas limitadas.Motor de gasolina discreto.
Afortunadamente aún quedan unos pocos que, aunque son catalogados como SUV y ofrecen un gran comportamiento en carretera, pueden afrontar importantes dificultades fuera del asfalto. Entre otros podríamos citar al “campero” Suzuki Grand Vitara o al “tecnológico” Land Rover Freelander II; pero sin duda el nuevo Nissan X-Trail es uno de los mejores para quien desee un SUV que le proporcione ciertas garantías en terrenos complicados. Si además le sumamos que es de los más capaces (maletero de 603 a 1.773 litros), vemos como el X-Trail se convierte en una excelente opción para según qué perfiles de usuario. Pensando en otras necesidades, recordar que Nissan ofrece para un público más urbano el Qashqai, para la clientela más selecta el Murano, y para los más “puros” y “auténticos” el Pathfinder, el Navara y el Patrol.
El nuevo Nissan X-Trail está a la venta desde el pasado verano, y recientemente ha sumado más opciones a la gama, con nuevas combinaciones de motores y cajas de cambio. Probamos las últimas versiones en llegar, la diésel de 150 cv con cambio automático y la de gasolina 2.5 de 169 cv y cambio de variador continuo MCVT; versiones de una gama que parte en los 29.400 € del 2.0 dCi XE manual y finaliza en los 38.600 € de ese mismo motor pero con cambio automático, terminaciones LE y las opciones de navegador y xenón incluidas. Debemos recordar que existe otra versión diesel 2.0 dCi de 173 cv, aunque sólo disponible con cambio manual y por 1.100 euros más que el de 150 cv.
Con sus 4,63 metros de largo, el Nissan X-Trail es de los SUV compactos más grandes, y, por consiguiente, de los más capaces para la carga. Viene muy bien equipado ya desde el nivel XE (llantas de aleación de 16 pulgadas, radio-cd con mandos en el volante, etc) y se completa con detalles de lujo en los acabados más ricos: SE (control de crucero, sensores de lluvia y luz, volante de piel multifunción o llantas de 17 pulgadas) y LE (techo solar, cristales tintados, asientos eléctricos y calefactados o sistema de llave inteligente entre otras cosas); además de algunos packs que incluyen navegador y faros de xenón.
Pero por lo que más destaca el X-Trail sobre sus competidores es por el eficaz y avanzado sistema All Mode 4×4-i. Este dispositivo incluye los sistemas DDS (sistema de control de descensos) y USS (ayuda al arranque en pendiente); los cuales combina con el control de tracción y de estabilidad. El All Mode 4×4-i permite seleccionar mediante un conmutador situado en la consola entre tres modos de uso: 2WD, Auto y Lock. El primer modo es el indicado para un uso en ciudad y en terrenos de buena adherencia, pues transmite la potencia sólo a las ruedas delanteras y ahorra en torno a un 5% o un 10% de consumo. En el modo Auto el sistema detecta si es necesario repartir la potencia entre ambos ejes, de forma que cuando hay baja adherencia envía potencia a las ruedas trasera y tracciona mejor. Se ha probado este sistema frente a otros de la competencia y se ha verificado que es el más rápido en responder, lo cual repercute en su capacidad de traccionar. Por último, el modo Lock aplica un reparto fijo del 50% de la fuerza a cada eje, una modalidad sólo disponible para velocidades inferiores a 40 km/h y para superar obstáculo difíciles.
Y en cuanto a sus mecánicas, nos faltó por probar la 2.0 dCi de 173 cv (asociada obligatoriamente al cambio manual), que es la más rápida, tiene unos consumos muy razonables y un precio competitivo: 10,0 segundos de 0 a 100 km/h, 7,4 l/100 km de gasto medio y 32.100 € con el acabado SE. Sí probamos las más cómodas y suaves 2.0 dCi 150 cv aut (33.500 € el SE) y 2.5 169 cv MCVT (34.900 € el LE), entre las que recomendamos claramente la versión diésel, tanto por su consumo (8,1 l/100 el diésel y 9,3 l/100 km el gasolina) y par (320 Nm a 2.000 rpm frente a 233 Nm a 4.400 Nm) como por el funcionamiento de su cambio de marchas, más agradable de uso el automático del diésel. Básicamente nuestra valoración se muestra favorable al dCi debido al mayor par motor a un régimen de revoluciones más bajo, pues para un coche de su tamaño y peso es preferible disponer de fuerza a bajo y medio régimen que de más potencia a altas revoluciones.