Los precios en Europa

¿QUIEN PAGA MAS?

En España los coches tienen por lo general uno de los precios franco fábrica más bajos de Europa, pero al tiempo soportan una de las fiscalidades más gravosas de la Unión Europea. ¿Qué pasará si se equiparan los precios en la Unión Europea? ¿Serán más caros los coches en España que en Alemania mientras la renta per cápita es casi la mitad?

El 1 de octubre entrará en vigor el nuevo reglamento de distribución de vehículos y está todavía por determinar cual será su efecto en el consumidor. Por una parte, parece que ante una liberalización del sector (venta a través de Internet, grandes superficies, etcétera) aumentará la competencia y por tanto bajarán los precios. Sin embargo, por otro lado aparece la tan temida equiparación de tarifas antes de impuestos en toda la Unión Europea.

En España, que junto con Grecia y Finlandia nos beneficiamos de los precios franco fábrica más bajos, nos veríamos perjudicados, pues las tasas de impuestos que pagamos son de las más altas de la UE. Algo muy preocupante si tenemos en cuenta que los salarios no tienen nada que ver con los del Centro y Norte de Europa.

Según el informe bianual de la Comisión Europea, las diferencias de precios entre unos países y otros pueden llegar a ser de hasta casi un 60% según modelos. Existen curiosidades, como por ejemplo que la nacionalidad de una fábrica no conlleva que sus modelos sean más baratos en su mercado; que el segmento de los coches de lujo es en el que menos diferencias se aprecian; que los ingleses tienen que pagar más por conducir con el volante a la derecha… o que en los últimos años han aumentado todavía más las diferencias de precios entre unos países y otros.

Enrique Marco, Autocity.

27 de marzo de 2002.

EL ORIGEN DE LAS DIFERENCIAS

Armonizar los precios de los automóviles en Europa es un tema que tiene ‘mucha miga’. Ya no se trata de que el poder adquisitivo sea mucho más elevado en Austria o en Alemania que en Grecia o Portugal, sino que cada país impone unas cargas fiscales distintas.

Básicamente, las diferencias de precios en un mismo modelo entre un país y otro son originadas por la fiscalidad que se aplica en los diferentes territorios. Los fabricantes marcan precios más bajos en los países que más impuestos pagan. Todo esto se hace con el fin de que el vehículo, puesto en la calle, no cueste más en los países con altas cargas fiscales que en los que se benefician de gravámenes más suaves.

España se encuentra en el caso de los que tienen precios bajos antes de impuestos, pero que luego en la práctica el ahorro no es tal. Por ejemplo, en España pagamos unos 2.000 euros de impuestos más que en Alemania o Gran Bretaña por coche. De esta forma, la presumible ventaja de que un 90% de los modelos analizados cuesten en torno a un 20% menos que en la media de la UE se esfuma al pasar por la ‘caja’ de hacienda.

LAS MAYORES DIFERENCIAS

En Alemania varios fabricantes (incluidos los japoneses) mantienen una estrategia de precios elevados. Sin embargo algunos fabricantes alemanes como BMW y Daimler-Chrysler (Mercedes, Chrysler ) así como Ford (Ford, Land Rover, Mazda y Volvo) limitan las diferencias de precios en la Zona Euro a un 15 por ciento o menos.

Los precios generalmente bajos antes de impuestos en Finlandia, Dinamarca y Grecia son una respuesta de los fabricantes a los altos impuestos de estos paises. Fijan los precios franco fábrica en un nivel bajo porque es necesario para que los precios después de impuestos sean asequibles. Al fin y al cabo, los impuestos en esos países hacen que los ciudadanos paguen el doble o el triple por su vehículo.

Mientras la Comisión permita diferencias de impuestos entre los países, será difícil alcanzar precios iguales dentro de Europa y de hacerse así la situación será injusta y peligrosa para el sector del automóvil en los países que actualmente tiene una mayor carga fiscal.

Curiosamente es en los utilitarios donde se encuentran las diferencias de precio mas importantes, pese a que su coste limitado no debería dejar mucho margen para ellas. La Comisión ha encontrado que la diferencia media de precios en la zona del euro es mucho más elevada (muy superior al 20 por ciento) que en los segmentos superiores. Por ejemplo, a la hora de comprar un Corsa la diferencia puede llegar a ser de un 36,9 por ciento, un Fiesta de un 16,4 %, un Clio de un 26,4 % o un Peugeot 106 de un 20,3 %.

La diferencia de precios de un coche de gama media puede alcanzar, en algunos casos, 4.488 euros en la Zona Euro e incluso 7.545 euros en la Unión Europea en su conjunto.

LOS MAS CAROS Y LOS MAS BARATOS

Hasta que llegue la unificación de tarifas los precios varían sustancialmente de unos países a otros, fundamentalmente por lo que antes hemos explicados referente a los impuestos.

En el Reino Unido, Alemania y Austria los coches son más caros franco fábrica. Finlandia, Dinamarca, Grecia y España se sitúan sin embargo como los países más baratos. Los germanos se llevan la palma, pues 41 de los 81 modelos analizados tienen allí el precio más elevado, en torno a un 20% más que la media de la Eurozona. Ese mismo incremento del 20% sobre la media afecta también a 31 de los modelos que se venden en Austria:

España: 13.695

Alemania: 15.031

Austria: 14.464

Dinamarca: 10.931

España: 47.420

Alemania: 49.542

Austria: 49.468

Irlanda: 46.560

España: 21.190

Alemania: 22.400

Austria: 22.415

Suecia: 19.803

España: 7.749

Alemania: 8.942

Austria: 8.357

Dinamarca: 6.497

España: 10.400

Alemania: 12.056

Austria: 11.502

Dinamarca: 9.000

EL CASO BRITANICO

La tradición tiene un precio, y para los británicos mantener su querida libra esterlina supone un importante incremento en el precio de los coches respecto a otros países de la Zona Euro, por la alto cotización de su divisa.

Esto, más el coste del volante a la derecha les supone un significativo incremento de precio. Algunos modelos llegan a costar un 60% más respecto a los países más baratos. La Comisión ha observado que para los consumidores británicos e irlandeses que compran un coche en otro Estado miembro, el suplemento por el volante a la derecha es generalmente más bajo en los modelos japoneses y más alto en los coches fabricados por el Grupo Volkswagen (VW, Audi y Seat). Lo curioso es que incluso los Land Rover, Rover y MG, fabricados dentro de sus fronteras, tienen un precio más elevado que, por ejemplo, en España.

España: 18.554

Reino Unido: 23.642

España: 4.886

Reino Unido: 7.941

España: 46.790

Reino Unido: 49.982

España: 9.581

Reino Unido: 12.472

España: 12.597 €

Reino Unido: 14.054 €

NACIONALIDAD DEL FABRICANTE

Uno de los datos que más curioso nos ha parecido ha sido el de que la nacionalidad del fabricante no implica que en su mercado los precios sean más bajos, resultando en muchos casos bastante más caros que la media de la UE. Ejemplos tenemos unos cuantos, como Alfa Romo en Italia, Opel en Alemania, Rover en el Reino Unido o Seat en España:

Italia: 27.135

Dinamarca: 18.041

Alemania: 12.262

Finlandia: 9.272

Reino Unido: 22.374

Portugal: 17.748

España: 6.390

Grecia: 5.451