Clio Sport V6

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AUDACIA ES EL JUEGO

A los dos años de su primera aparición en un Salón (como Clio Trophy V6 con el motor V6 3.0 subido a 250 CV) Renault se ha decidido a comercializar su pequeño «monstruo» de la mano de TWR (Tom Walkinshaw Racing), que es quien los monta finalmente en su planta sueca de Uddevalla, de donde también sale el Volvo C70.
Este «superClio» ha sido civilizado para facilitar su conducción, y dotado de una nueva caja de cambios (PK6) de 6 relaciones, que también veremos en otros modelos de la marca del rombo. Con mayores vías (11 cm más delante y 14 detrás) y una batalla aumentada en 4 cm (2,51 m), el Clio Sport V6 es un biplaza de motor central de carácter rabiosamente deportivo, sin la funcionalidad del Clio Sport 2.0 de 172 CV (sus simbólicos maleteros no suman ni 120 litros, repartidos entre 67 bajo el capó delantero y 45 tras los asientos). Eso sí, sus prestaciones son de auténtico infarto.

Motor

MOTOR

El bastidor ha sido totalmente modificado y reforzado, aunque aprovecha capó, parabrisas, techo y portón del Clio Sport 2.0. El motor va en posición transversal por delante del eje trasero, lo que le permite una gran compacidad de medidas, con casi idéntica longitud que el Clio normal (3,8 m). Retocado convenientemente y dotado de distribución variable, el V6 de 2.946 cc da ahora 230 CV a 6.000 rpm (con el corte de inyección a 7.100) y 30,6 mkg de par máximo a 3.750 rpm, lo que le asegura unos bajos excepcionales. No lleva ningún tipo de ayuda electrónica ni autoblocante, pese a lo cual su comportamiento es mucho más noble y progresivo que el anterior Clio Trophy, aunque lógicamente exige un alto nivel de conducción, como buen tracción trasera que es, para sacar partido a toda su caballería, especialmente sobre mojado.
Las suspensiones, con un eje Mac Pherson anterior y un sofisticado multibrazo posterior, no son excesivamente secas para su monta de neumáticos, con llantas de 17 pulgadas (unas OZ de aleación, de 7,5 pulgadas de ancho delante y 8,5 detrás).

Equipamiento

EQUIPAMIENTO

De terrorífica eficacia y espectacular apariencia, este «superClio» disfruta también de un sofisticado equipamiento, similar al del Clio Sport 2.0, con climatizador de aire acondicionado, tapicería en piel y Alcántara, volante de cuero, relojes de fondo blanco, cierre centralizado por telemando, radiocassette con cargador de 6 CD, etc. Los frenos están a la altura de sus prestaciones, con 4 discos de 330 y 300 mm (ventilados delante) y pinzas delanteras de 4 pistones, y por supuesto, con ABS+EBD.
A la venta a final de año por unos 6 millones de ptas, será tan exclusivo como antaño lo fuera el R-5 Turbo de motor central, vendiéndose en 4 colores exclusivos. A España llegarán sólo unas 60 unidades en el 2001, de las que casi todas están ya adjudicadas.

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