Mercedes Clase ML 320 CDI

La firma alemana Mercedes siempre ha sido un referente entre los mejores fabricantes de coches del mundo. Dispone de una extensa gama de modelos en prácticamente todos los segmentos del mercado del automóvil, desde los monovolúmenes, como el Clase A y el nuevo Clase B, hasta verdaderos mastodontes todoterreno como el Clase G o el nuevo GL, considerados como los mejores de su segmento, pasando por el atípico Clase R que, como ellos mismos afirman, aúna varios conceptos en uno: turismo, familiar y SUV. Los turismos de diferentes categorías también lidian con lo más selecto, como la berlina Clase C, la gran berlina Clase E o la berlina de lujo Clase S; también militan entre sus filas roadsters como el SLK o superdeportivos como el SL, así como el SUV que nos ocupa, el ML, que tanto éxito ha obtenido desde su primera comercialización en 1997 hasta su restyling en 2001.

Mercedes quería renovar su ML, uno de sus productos estrella, para seguir manteniendo las posiciones de liderato dentro del segmento de los SUV de lujo, puesto que ya mostraba una imagen algo anticuada. Aspectos como el diseño, el chasis y el motor se han revisado a conciencia para actualizar el modelo y hacer frente a una dura competencia donde encontramos modelos como el X5 de BMW, con un comportamiento más dinámico, el Range Rover, un auténtico 4×4 impregnado del clásico lujo inglés, el XC90 de Volvo, muy juvenil y algo más asequible, el discreto Touareg de Volkswagen, caro para ser el ‘coche del pueblo’ pero de muy alta calidad y con propulsores inimitables, o el Porsche Cayenne, la exquisitez deportiva en formato XXL, además del reciente ‘trailer’ de Audi, el tremendo Q7, pionero para albergar a siete pasajeros, al que recientemente ha seguido el nuevo, pero de estilo tradicional, Jeep Commander. Con un precio de 54.900 euros para la versión ML 320 CDI se coloca en la zona alta del segmento, como es habitual en la marca de la estrella. Además, para más exclusividad, muchos elementos estéticos, de confort y de seguridad, se dejan en opción a elección del cliente para pagarse aparte. ¿Quieres conocerlo a fondo?

Presenta una carrocería mucho más musculosa y atlética que su antecesor, repleta de contrastes entre ángulos y contornos suaves que sugieren mucho más dinamismo que las formas redondeadas y menos expresivas de la primera generación. Todos los rasgos están mucho más marcados, transmitiendo más personalidad y potencia, mediante elementos como los paragolpes mucho más abombados que sugieren fuerza y robustez, una parrilla frontal más agresiva y robusta con el anagrama de Mercedes en primer plano, las ópticas más afiladas y modernas, los pasos de rueda muy prominentes y una línea de cintura elevada que acentúan su agresividad y aerodinámica.

El nuevo ML ha crecido en todas las cotas externas, hasta 150 mm en longitud, alcanzando ahora los 4,780 metros, 71 mm en anchura y la altura se ha rebajado en 5 mm, con lo que su imagen es mucho más compacta. Además, para mejorar su capacidad dinámica, la distancia entre ejes se ampliado en 95 mm hasta los 2,915 metros, garantizando gran aplomo y estabilidad dado su inmenso volumen. De un vistazo se puede apreciar como los aditamentos exteriores están claramente enfocados a realizar una conducción todoterreno, con cortos voladizos muy elevados, protecciones frontales y traseras en color negro y gran altura al suelo.

Dada la demanda de mayor espacio interior por los clientes de estos SUV de lujo, se ha diseñado un habitáculo amplio, espacioso y, como no, lujoso, aunque a nuestro juicio con un aspecto general demasiado sobrio. Aún así, podemos afirmar que Mercedes ha realizado un gran trabajo combinando un entorno muy agradable, con los materiales de la más alta calidad, con las combinaciones de colores más atractivas y prestando una especial atención a los detalles.

Nada más adentrarnos al interior, respiramos la alta calidad típica de los modelos de la marca, con una característica organización de los elementos que dejan un habitáculo muy espacioso para los pasajeros, que nada más sentarse se sentirán abrazados, protegidos y seguros. El espacio es la nota dominante en el nuevo ML, puesto que entre los asientos delanteros y traseros la habitabilidad ha crecido en 15 mm, alcanzando una distancia total de 880 mm, una cifra digna de los mejores coches de lujo. Los asientos traseros son abatibles asimétricamente en configuración 60:40 y se pueden ocultar bajo el piso dejando hasta 1.830 litros de carga hasta el techo, aunque si recurrimos al sistema opcional Easy Pack que permite extraer las banquetas del habitáculo, alcanzará una significativa capacidad de carga de hasta 2.050 litros, una capacidad muy superior a la de muchos de sus rivales. Con los 3 asientos habilitados el volumen del maletero se queda en unos generosos 551 litros hasta la bandeja ó 833 litros cargando hasta el techo.

En nuestra unidad de pruebas todo el habitáculo resultaba muy ergonómico y confortable y la postura perfecta al volante era fácil de encontrar, gracias a un volante regulable en altura y profundidad y a unos asientos regulables eléctricamente fabricados en piel. Todos los mandos de las funciones de seguridad y confort se encuentran agrupados, quizás demasiado, en la consola central muy al alcance del conductor, bajo el climatizador automático Thermatic o el sistema de climatización multizona opcional Thermotronic, que por su parte superior corona una gran pantalla a color que refleja las funciones del sistema de información, entretenimiento y navegación multifunción Comand. Todos los sistemas de audio y telefonía, así como los comandos del ordenador de viaje, se pueden manejar ahora desde el volante multifunción de serie.

La nota de lujo en el habitáculo viene de la mano de exclusivos materiales cromados y de madera que se extienden por todo el habitáculo. Los cromados los encontramos en puntos clave como las salidas de la ventilación, sobre los brazos del volante o en los biseles de los mandos del sistema de radio y climatización, mientras que la madera se extiende por los guarnecidos de las puertas, por toda la consola central y el túnel de transmisión, donde se ubican algunos huecos portaobjetos muy útiles.

En definitiva, el interior transmite un refinamiento muy elegante y discreto, que se puede combinar con los más lujosos acabados en madera o los más vanguardistas materiales cromados. De hecho, en el apartado del confort para los pasajeros, nuestro ML 320 CDI facilita de serie elementos exclusivos como el climatizador automático Thermatic, acabados en aluminio, un apoyabrazos central con un amplio hueco portaobjetos, la pantalla multifunción en el cuadro de instrumentos, ajuste eléctrico parcial para los asientos delanteros, volante multifunción, conexión automática de luces, palanca de cambios en la columna de dirección y el cambio Direct Select en volante o los espejos retrovisores exteriores térmicos y ajustables y abatibles eléctricamente, entre otros muchos elementos. En el apartado mecánico, también incorpora multitud de funciones de serie esenciales para la seguridad y el confort, como el Sistema Electrónico de Tracción Total permanente 4ETS, el exclusivo cambio automático de 7 velocidades 7G-Tronic, Control y Regulador de Velocidad Tempomat y Speedtronic, Control de Velocidad de Descensos (DSC) con regulador variable de velocidad, Control de Presión de Neumáticos y los controles ESP con ABS con función Off-Road, ASR y BAS. No se olvida de presentar una estética espectacular, con llantas de 17 pulgadas con neumáticos 235/65, pudiendo optar por llantas de 18 ó 19 pulgadas, y con las protecciones frontales, laterales y traseras para la conducción todoterreno.

Y por si esto fuera poco, se puede optar por tecnologías de vanguardia como el nuevo sistema de climatización multizona Thermotronic, el sensor de lluvia, el filtro de partículas sin mantenimiento, el sistema Keyless Go de acceso sin llave, el sistema de ayuda al aparcamiento Parktronic y el Comand APS con sistemas de telefonía y navegación por satélite que cubre de toda Europa. En el campo de la seguridad activa se puede disponer del sistema de Suspensión Neumática Airmatic, del reconocimiento automático de asientos infantiles para desactivación del airbag del pasajero y del Control Activo de Iluminación con los faros Bi-xenon. De forma pasiva, el nuevo ML incluye airbags frontales, laterales (plazas delanteras) y de cortina. A este equipo se puede añadir el sistema Pre-Safe que activa los sistemas de seguridad anticipándose ante una situación de accidente inminente. Tensa los cinturones de seguridad, coloca los asientos delanteros con regulación eléctrica en la posición ideal y cierra el techo solar si prevé un vuelco. Además este sistema está interconectado con los reposacabezas activos, con el sistema ABS, con el asistente a la frenada BAS y con el control de estabilidad ESP para corregir cualquier reacción anómala del coche.

Para este prueba a fondo hemos elegido la motorización diesel más representativa de la marca en cuanto a aceptación y demanda, puesto que ofrece una relación perfecta entre las mejores prestaciones con los consumos más bajos. El compacto propulsor 3.0 V6 turbodiesel 24V fabricado en aluminio y montado en la versión 320 CDI es muy ligero y logra la máxima eficacia de combustión con un turbocompresor de geometría variable regulada eléctricamente y con la más moderna inyección directa por common rail mediante unos precisos inyectores piezocerámicos y una optimizada gestión electrónica. Esto le permite entregar una potencia de 224 cv a 3.800 rpm mostrándose muy dinámico en recuperaciones con relaciones de cambio largas, gracias a sus 510 Nm de par motor que entrega desde 1.600 a 2.800 rpm. Aún así debemos destacar que este ML, como su predecesor, no es un velocista de concepto y no presume precisamente de un comportamiento netamente deportivo, puesto que está enfocado a maximizar el confort de marcha y el bienestar de sus ocupantes, que es total gracias a la suavidad y silencio de este vanguardista motor V6 diesel. Si se utiliza el acelerador a conciencia obtendremos una fuerza inesperada para ser un peso pesado que alcanza los 2.185 kg. Las prestaciones son de las mejores del segmento, con una aceleración de 0 a 100 km/h en 8,6 segundos y una velocidad máxima de 215 km/h. Aún así los consumos son asombrosamente bajos, desplazando la aguja a razón de 9,4 l/100 km en ciclo combinado. Por otra parte, las emisiones del 320 CDI son realmente bajas gracias a la incorporación de dos catalizadores, además de poder solicitarse opcionalmente el filtro de partículas sin mantenimiento reduciendo las emisiones al medioambiente a una cifra insignificante.

Estas buenas prestaciones se consiguen en gran parte por el aprovechamiento de las posibilidades del motor gracias al exquisito cambio automático de Mercedes 7G-Tronic, de serie en todas las versiones del ML, el primer cambio automático secuencial de 7 velocidades montado en vehículos de producción en serie. Las relaciones cortas de esta transmisión automática permiten lograr unas aceleraciones muy rápidas, además de lograr un tremendo desahogo a alta velocidad, gracias a una séptima marcha que disminuye los consumos notablemente. Las transiciones entre marchas son extremadamente suaves y ofrecen la opción de realizarse de modo secuencial desde los botones del volante, algo que no se podrá hacer desde la pequeña palanquita destinada a tal efecto ubicada tras el volante, que sin embargo deja libre el túnel central sobre el que se suele ubicar la palanca de cambio.

El comportamiento de este nuevo ML es fantástico en cualquier terreno gracias a un chasis muy evolucionado y con una rigidez excepcional, a lo que contribuye fundamentalmente el innovador sistema de tracción total permanente regulada electrónicamente 4ETS, que detecta la pérdida de tracción en alguna rueda de un eje y transmite automáticamente toda la fuerza a la rueda contraria del mismo eje para salvar la situación. También destaca una suspensión muy elaborada, tanto en la versión convencional de serie, como en la opcional neumática Airmatic System, con el sistema de suspensión adaptativa (ADS), que no ofrece grandes ventajas para la conducción On-Road en autopistas, pero sí lo hace de forma importante en una conducción Off-Road extrema, pudiendo elevar la altura del conjunto hasta 291 mm sobre el suelo y regular la dureza de la amortiguación hasta en tres modos: Auto, Sport y Comfort, dependiendo de las exigencias del conductor. Los ingenieros de Mercedes han hecho un gran trabajo para adaptar los sistemas de ejes, suspensión, frenos y dirección a los nuevos requisitos Off-Road del ML. De hecho, opcionalmente existe un pack Off-Road Pro para los que de verdad quieran realizar una exigente conducción 4×4, con bloqueo de los diferenciales, transmisión de relación corta, defensas en los bajos y la suspensión Airmatic con multitud de funciones todoterreno. El resultado es un conjunto que aúna la mejor calidad de marcha con el mayor confort de rodadura, aunque la suspensión convencional de amortiguadores y muelles nos ha parecido demasiado blanda en su tarado perceptible en fuertes apoyos en curva. La excelente dirección electrohidráulica de desmultiplicación variable respecto de la velocidad, corrige esta sensación de falta de control con gran precisión y una desmultiplicación variable en dureza dependiendo de la velocidad.

El sistema de frenado es muy eficiente gracias a unos discos delanteros y traseros de 330 mm de diámetro, ventilados los primeros, resultando mucho más potentes que los de la generación anterior.