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EL ESTILO DEL NUEVO SIGLO
El proyecto más importante de la historia de Fiat, el Stilo, que reemplaza a los Bravo/Brava, ya está a la venta en España. Un coche que se anticipa a todo lo que la competencia ofrecerá en el futuro.
El objetivo del nuevo Fiat Stilo es particularmente ambicioso; ir mas allá de su propio segmento C y convertirse en la nueva referencia de su segmento a través de su diseño, su tecnología y su calidad, lo que ha obligado a replantearse a la marca de Turín nuevos conceptos en cada uno de estos apartados, llegando incluso a crear una nueva fábrica modular en Cassino donde poder cubrir sin condicionantes anteriores sus nuevas exigencias de calidad industrial.
Con el Stilo Fiat ofrece un turismo desdoblado en dos versiones que reúne lo mejor de la tradición automovilística italiana; diseño con gran personalidad (sólido y bonito), tecnología avanzada, carácter y además, un equipamiento de primer nivel, impensable hace dos años incluso en turismos de lujo, junto a una serie de soluciones inteligentes de confort y habitabilidad que aplican a un compacto el carácter polivalente de los modelos más funcionales de su clase.
Carrocerías
CARROCERIAS: DOS EN UNO
El Stilo releva a los Bravo/Brava estrenando una nueva plataforma de 2,60 m de batalla y ofreciendo dos versiones diferenciadas: un 3 puertas más corto y bajo (4,18 m de largo y 1,46 m de alto), con un aire marcado por el individualismo, las altas prestaciones y el placer de conducir, y un 5 puertas algo más largo y alto (4,25 m y 1,52 m respectivamente) en el que predomina el confort, la capacidad, la seguridad y la versatilidad de uso, añadiendo a la fórmula tradicional ventajas propias de un monovolumen: comodidad de acceso, posición de conducción más elevada, espacio interior, asiento del acompañante abatible, asiento posterior reclinable y deslizante, etc.
Su diseño recupera trazos y aristas más marcados y menos curvos, de inspiración ‘arquitectónica’, con un frontal más clásico y sencillo de inspiración germana, distinto -como en los Punto- en el 3 y 5 puertas. En el primero, el paragolpes alberga tres grandes tomas de aire cuadradas, que refuerzan su carácter deportivo, mientras que en el segundo éstas se unifican bajo un tallado común, con nervaduras horizontales que refuerzan la sensación de anchura.
En el lateral, la alta línea de cintura unido a la menor altura del 3 puertas contribuye a crear una imagen más dinámica, sobre todo por detrás, con unos grupos ópticos trapezoidales muy logrados que combinan la tonalidad roja y blanca en forma de flecha roja, con dos pequeñas zonas blancas a los lados, flanqueando un maletero que presenta un diseño adelantado con respecto al perfil trasero del coche.
Por su parte, la mayor altura del Stilo 5 puertas, con superficies acristaladas más amplias y verticales permite una mayor modularidad interior, con un maletero que también varía ligeramente (como en los Punto) con una ligera capacidad extra en el 5p, que juega con la posibilidad de variar el volumen útil del mismo (entre 335 y 410 litros) desplazando longitudinalmente la banqueta trasera -independiente para cada asiento-, pero además también con la ventaja de abatir el respaldo del asiento del acompañante delantero, lo que permite alojar objetos de gran longitud o utilizarlo como mesa de trabajo (contando ambos con trampilla portaesquíes en el respaldo trasero).
Habitabilidad
HABITABILIDAD: SALTO CUALITATIVO
La línea del Stilo 5 puertas resulta muy armoniosa, acercándose a la de un monovolumen por su capacidad, pero manteniendo la homogeneidad funcional de un turismo de 5 puertas. Su portón posterior es mayor y baja más que el del 3 puertas, y los grupos ópticos son ahora cuadrangulares, con una franja blanca central. El espacio para piernas es excelente, en la mejor tradición Fiat de lograr el máximo aprovechamiento espacial, algo en lo que la marca de Turín es una consumada especialista.
Pero además, Fiat ha logrado con el Stilo una auténtica sensación de mayor calidad percibida, a través de la superior calidad de materiales y el mejor diseño de componentes, algo especialmente comprobable en el interior del vehículo. Los estímulos logrados a través de sus formas, detalles y elementos, permiten apreciar un ambiente superior interno, desde lo acogedor de los asientos a la ergonomía del salpicadero, claro por arriba y oscuro por abajo, con una configuración agradable al tacto y a la vista, gracias a una acertada elección de revestimientos y combinación de colores.
En cuanto al bastidor, Fiat ha logrado con el Stilo un magnífico compromiso entre confort y estabilidad, con unas suspensiones capaces de permitir unas prestaciones comparables a la de los turismos del nivel superior, con una rigidez de caja mayor que la lograda hasta ahora por ningún otro Fiat berlina. Se ha conseguido garantizar una gran facilidad y precisión de conducción, junto con el mejor agarre al piso y el mayor confort posible. Ello se ha logrado gracias a un tren delantero Mac Pherson con triangulación auxiliar, y un eje posterior torsional semiindependiente, con un travesaño central de chapa doblada por hidroconformación, que repercute en una mejor manejabilidad, con barras estabilizadoras huecas (más ligeras y con menos inercia) y unos casquillos de unión al puente hidráulicos que en los apoyos fuertes en curva crean un efecto de convergencia en las ruedas, con una caída negativa constante (-1º) de la rueda exterior.
El resultado es una estabilidad excelente, sin comprometer el confort y con la ventaja de utilizar la misma suspensión en toda la gama (salvo el nivel Abarth del 2.4), con los mismos tarados de muelles, amortiguadores y barras estabilizadoras. Un avance que sitúa al Stilo un punto por delante de su competencia europea y nipona. Además, el Stilo monta frenos de disco a las 4 ruedas en toda la gama (de 257 mm delante, autoventilados, y 251 mm detrás, subiendo delante a 284 mm en el 1.8 y los diesel 1.9 JTD, y a 281 mm -pero más gruesos- en el 2.4 20V), y por supuesto con sistema ABS (+EBD) de serie para todos, incluyendo además otros refinamientos como servofreno de emergencia (Brake Assist), control de tracción (ASR/MSR), etc. La dirección es de asistencia eléctrica Dual Drive, como en los Punto, empleando un motor eléctrico en lugar de una bomba hidráulica accionada por el motor, con lo que además de suponer un importante ahorro energético que repercute en el consumo (un 3% menos), permite dos niveles de asistencia, menor a mayor velocidad, y mayor en tráfico urbano y maniobra, cuando se aprieta la tecla ‘city’, situada en el centro del salpicadero, con la seguridad de que por encima de los 70 km/h, la asistencia se iguala al nivel menor.
Motores
AMPLIA OFERTA DE MOTORES
En cuanto a motores, Fiat ofrece una gama muy amplia y bien estructurada: tres de gasolina (todos multiválvula) y dos diesel (el 1.9 JTD en potencias de 80 y 115 CV). El primer nivel de acceso corre a cargo del 1.6 16V, el motor ‘torque’ de Fiat que mantiene los 103 CV que ya daba en el Bravo, obtenidos a 5.750 rpm, con un par de 14,8 mkg a 4.000 rpm. Su velocidad máxima sube a los 185 km/h (183 el 5p) y el consumo combinado es de 7,3 litros/100 km (una décima más el 5p).
El segundo nivel es el 1.8 16V, que saca 133 CV a sus 1.747 cc, subiendo ya el par a 16,5 mkg a 3.500 rpm, con unas prestaciones muy brillantes que llevan su velocidad máxima al umbral de los 200 km/h y su aceleración al de los 10 segundos en el 0-100 km/h, mientras que el consumo se mantiene en el ciclo mixto sobre los 8 litros/100 km.
Finalmente, el alto de gama en gasolina es el 2.4 20V, el pentacilíndrico de 2.446 cc, con sus 170 CV a 6.000 rpm y un par de 22,5 mkg a 3.500 rpm, capaz de lograr los 215 km/h, acelerando de 0 a 100 km/h en menos de 9 segundos, y con un consumo mixto de 9,7 y 9,9 litros/100 km respectivamente, siendo además el único en montar de serie el cambio secuencial automático Selespeed.
Los diesel cuentan con el brillante e innovador motor 1.9 JTD de 1.910 cc, con inyección directa ‘common rail’ y turbocompresor, estando dotada la versión de 115 CV con el radiador del aire de admisión (‘intercooler’) y turbo variable. El 80 CV da un par de 20 mkg y el 115 CV de 26 mkg, el primero a 1.500 rpm y el segundo a 2.000, mientras que ambos dan su potencia máxima a 4.000 rpm. Con un consumo prácticamente idéntico (incluso 0,1 litros menos el 115 CV) al filo de los 5,4 litros/100 km, estos JTD ofrecen unas prestaciones muy notables (172 km/h el 80 JTD y 192 el 115 JTD).
Equipamiento
UN EQUIPAMIENTO EXCEPCIONAL
En cuanto a la gama, se ha pretendido una mayor facilidad de elección para el cliente. Así, los nuevos Stilo se decantan todos en carrocería de 3 y 5 puertas (incluido el deportivo 2.4 20V Abarth) en todas sus motorizaciones, con tres niveles de acabado; el básico/medio Active, el medio/alto Dynamic y el deportivo Abarth, exclusivo del motor 2.4 20V de 170 CV.
El Active es mucho más que un nivel básico, estando dotado de serie de ABS, AST/MSR, 6 airbags (delanteros, laterales y de cabeza), telemando de cierre a distancia, antirrobo Fiat Code II, reposacabezas y cinturones de seguridad de 3 puntos para todas las plazas, fijaciones Isofix para sillas infantiles, cinturones delanteros con pretensor y limitador de esfuerzo, faros antiniebla (integrados en los grupos ópticos), radiocassette, personalización ‘My Car’ (que permite reglar diversos ajustes como número de puertas a cerrar con el mando a distancia, ajuste del reloj, sensor crepuscular, etc), ordenador de a bordo, volante regulable en altura e inclinación, reglaje lumbar y de altura en asiento del conductor, y guantera refrigerada y calefactada (si el coche va climatizado). Lleva además un cajón portaobjetos bajo el asiento del conductor, cierre centralizado (con dead lock y supercierre), elevalunas eléctricos delanteros (antipinzamiento) y retrovisores exteriores por mando eléctrico, calefactados y en color carrocería. Todo de serie en este primer nivel, con lo que ello supone de mayor valor (un 15%) respecto a su competencia, a lo que se añaden sus dos años de garantía.
El nivel Dynamic añade a lo anterior el aire acondicionado, espejos de cortesía con luz, portaobjetos bajo el asiento del pasajero, apoyacodos delantero y trasero con sendos portaobjetos internos y, según las carrocerías de 3 ó 5 puertas, asientos deportivos con el pomo del cambio en piel, o interiores especiales ‘Next Generation’.
Por último, el nivel Abarth reservado al 2.4 20V añade el climatizador dual del aire acondicionado, control de crucero, sistema de navegación GPS (Connect +Nav) con pantalla multifunción de 7 pulgadas con mapa de carreteras y ciudades, y el control electrónico de estabilidad ESP. Y además, por si esto fuera poco, incorpora también de serie los sensores de lluvia y aparcamiento, el crepuscular (luces), los elevalunas eléctricos traseros (5 puertas), volante y pomo del cambio en piel, volante multifunción (11 teclas), inserciones de madera, molduras y manillas en color carrocería, llantas de aleación de 16 pulgadas y alerón deportivo (3 puertas).
En resumen, un nivel de equipamiento sorprendente para un compacto, que reúne un nivel de tecnología, amplitud y confort desconocido hasta ahora en su categoría, junto a unas características dinámicas excepcionales. Este es el secreto del Stilo para llegar ser el gran éxito de Fiat en esta primera década del siglo.
Galería I
GALERIA FOTOGRAFICA I
Galería II
GALERIA FOTOGRAFICA II
