VW Beetle ABT
Primero le toco al más potente de la gama, al Beetle 2.0 TFSI, que tras pasar por las manos de ABT, aumentaba su potencia de los 200 a los 240 CV, y hacía lo propio con las capacidades dinámicas del modelo, con nuevas suspensiones, calzado deportivo y frenos. Más tarde, hace solo un año, os presentábamos el ABT Beetle 2.0 Diesel, la preparación con la que el tunner afincado en Kempten, Alemania y especialista en los modelos del Grupo Volkswagen, daba su toque deportivo a una de las motorizaciones más populares entre los compradores del nuevo Beetle.
Dejaba claro Hans-Jürgen Abt, el director de ABT Sportsline, que racional no está enfrentado con pasional, y que tanto la versión más deportiva, la 2.0 TFSI, como la más racional 2.0 TDI, se adaptaban perfectamente a la filosofía de ABT. No en vano, ambos recibían una inyección de potencia considerable y nuevas piezas para el apartado dinámico, aumentando y mucho sus prestaciones y mejorando su respuesta en conducción deportiva. Ahora el preparador alemán nos presenta al completo su programa de tuning, adaptado a todos los modelos de la gama, de manera que independientemente de la motorización, siempre hay disponible un kit de potencia para mejorar la capacidad de respuesta y aceleración pura del nuevo Beetle.
Se trata en todo caso de reformas no intrusivas, pues si bien lo mejor de estas preparaciones se esconde bajo el capó, es concretamente en la unidad de mando del motor donde residen todos los cambios que hacen posible el aumento de potencia y par. Gracias a la optimización del programa de la centralita llevada a cabo por el departamento ABT Power, todos los Beetle reciben su plus de potencia y par, sin necesitar ninguna otra reforma más allá de la reprogramación.
Para los Beetle movidos por motores de gasóleo, además del 2.0 TDI, que aumentaba su potencia de los 140 CV originales a los 170 CV que rinde el ABT Beetle 2.0 Diesel, con un par máximo que también aumenta de los 320 a los 370 Newton por metro, está disponible también un programa de aumento de potencia para el motor de 1.6 litros. El motor diésel más modesto de la gama, que de origen rinde 105 CV, aumenta 20 CV de potencia gracias al programa de ABT, para situarse con 125 CV, y 285 Nm (frente a los 250 Nm), como un modelo con un rendimiento muy mejorado, que se quedaría a medio camino entre las dos opciones diésel de serie.
Los modelos turbo de gasolina también reciben un importante plus de potencia, comenzando como no por el ABT Beetle 2.0 TFSI, que pasa de 200 a 240 CV, y de 280 a 340 Nm, transformándose en un auténtico deportivo. Pero sus hermanos pequeños no se quedan atrás, y el Beetle 1.4 TSI sería capaz de sacar los colores a todo un 2.0 TFSI de serie, al aumentar la potencia de los 160 CV de serie a unos increíbles 210 CV, con un par que pasa de 240 Nm a 280 Nm. Por último está el 1.2 TSI, que también consigue una ganancia neta de potencia importante, pasando de 105 a 140 CV, y de 175 a 220 Nm.
Unas ganancias de potencia interesantes en toda la gama, que por supuesto se pueden acompañar de todos los aditamentos aerodinámicos y mejoras dinámicas del programa de tuning completo que ABT tiene disponible para el Beetle. Desde el spoiler delantero sobredimensionado, o las pestañas para los faros, hasta las llantas ABT en 20 pulgadas calzadas con neumáticos deportivos de perfil bajo dejan entrever el poderoso equipo de frenos ABT brake system. Junto con la suspensión deportiva ABT, que cuenta con muelles más cortos que acercan la carrocería al suelo y limitan el balanceo, el nuevo Beetle consigue un mayor agarre, más capacidad de frenada y una reacciones más deportivas debido a la menor deriva de los neumáticos de perfil bajo.
