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URBANO SIBARITA
El concepto que se tiene de vehículo utilitario hoy es totalmente diferente al de hace unos años. Si los coches que aún vemos circular por nuestras ciudades de hace más de una decada (Renault 5, Citroen AX, Peugeot 205, etc) se caracterizaban por tener reducidas dimensiones, interiores espartanos y precios económicos; en la actualidad no es raro ver urbanos que ofrecen una amplitud interior y unos niveles de equipamiento que nadie podría imaginar ni siquiera hace cuatro o cinco años. Claro, que el precio tampoco es el mismo.
Incluso fabricantes generalistas como Citroen, tienen en sus listas de precios automóviles como nuestro protagonista, el C3 1.4 HDi Exclusive, un vehículo en el que cuatro adultos pueden viajar totalmente erguidos y sin apreturas, y que de serie trae una larga lista de equipamiento propia de una berlina de representación: control de velocidad de crucero, sensor de aparcamiento, encendido de luces automático, espejos plegables desde el interior… Eso sí, el precio llega a los 15.840 euros.
Otro refinamiento destacable del que hace gala el Citroen C3 1.4 HDi es el mecánico. Su moderno motor turbodiesel, desarrollado conjuntamente por Ford y el Grupo PSA, presume de un rendimiento, consumo y silencio de marcha ejemplar; pues mueve al C3 con una soltura más que razonable, emitiendo un discreto nivel sonoro y consumiendo sólo 3,8 l/100 km en carretera (4,2 l/100 km en coclo combinado).
Enrique Marco, Autocity.
20 Enero de 2003.
DISEÑO Y EQUIPAMIENTO
El diseño del Citroen C3 es de esos que tienen tanto detractores como defensores, pues podemos decir que se sale de lo normal; aunque visto las tendencias que corren parece que la mayoría de los fabricantes le siguen. Unos lo llaman despecivamente ‘huevo’, pero otros apercian su funcionalidad y atrevimiento. Más que pronuciarnos sobre gustos, vamos a pasar a analizar lo que nos brina el modelo Exclusive, una versión equipada hasta los topes.
Exteriormente, el C3 Exclusive se diferencia del resto de la gama por las molduras de los paragolpes y laterales pintadas en el color de la carrocería, por los diversos cromados (manecillas de las puertas y portamatrículas trasero) y por las llantas de aleación de 15 pulgadas. Pero es en lo referente a elementos de confort eléctricos donde el C3 Exclusive se desmarca, con su programador de velocidad, sensor de lluvia, encendido automático de luces, espejos plegables eléctricamente y sensor de aparcamiento como elementos más destacables. De serie también incorpora el ABS, el climatizador automático y seis airbags. En opción, encontramos la tapicería de cuero, el navegador vía satélite, el cargador de CD y el techo practicable.
Además del amplio equipamiento de la versión Exclusive, sorprende en el C3 -esto ya en toda la gama- las medidas interiores y el práctico habitáculo. Con una altura de 1,52 metros y una longitud de 3,85 metros está claro que estamos ante un utilitario grande, y eso se nota en el interior. Por si fuera poco, los asientos delanteros pueden regularse en multitud de posiciones, y sentados al volante se puede adoptar desde la posición de un turismo hasta la típica de un monovolumen. La gran superficie acristalada también nos recuerda al interior de un monovolumen, así como las bandejas plegables que cuelgan de los respaldos de los asientos delanteros. El maletero tiene una capacidad de 305 litros, muy amplia para su categoría.
CONDUCCION
La mecánica que emplea el Citroen C3 1.4 HDi está dando unos excelentes resultados en materia de rendimiento, silencio y consumos; tanto que se utiliza para diversos modelos de Ford y Grupo PSA (Ford Fiesta, Ford Fusion, Peugeot 206, Peugeot 307…). Posee tecnología common rail y en este caso desarrolla 70 cv de potencia y 150 Nm de par a 1.750 rpm, pero lo más destacable del propulsor es su suavidad. Evidentemente, para un coche que supera la tonelada de peso y que tiene una gran altura que penaliza la aerodinámica, no se pueden esperar fulgurantes aceleraciones con 70 cv, pero para un uso normal y preferentemente en ciudad, los 165 km/h de velocidad punta y 13,4 segundos en aceleración de 0 a 100 km/h no defraudan. Si además a la hora de pasar por la gasolinera nos llevamos una grata sorpresa (5,0 l/100 en ciudad, 3,8 l/100 km en carretera y 4,2 l/100 km en ciclo combinado), pues la nota todavía es mejor.
En marcha agrada la progresiva y fina entrega de potencia así como el reducido nivel sonoro. En ciudad el C3 se encuentra estupendamente, y si hemos elegido la postura alta de la banqueta la gran visibilidad será otra ventaja más. Por autopista o carretera en buen estado, circular a cruceros de 140-150 km/h no reviste ningún problema, ni para el confort ni para el ruido. Ahora bien, como el tarado de los amortiguadores es más bien blando y el centro de gravedad del vehículo algo alto, en firmes irregulares y con curvas no es conveniente circular a alta velocidad, pues en esos terrenos otros coches más convencionales como los Peugeot 206 o Seat Ibiza le superan claramente. Por último, otro aspecto mejorable es el de la dirección, muy orientada a la ciudad, ya que es muy suave y cómoda para transitar a baja velocidad pero excesivamente sensible en carretera.