Toyota suspenderá indefinidamente la producción en Venezuela a partir del 13
‘A partir del 13 de febrero de los corrientes, ocurrirá una parada indefinida de producción de planta, la cual tendrá carácter crítico, tomando en cuenta que no solo se afectarán las actividades de producción, sino que, también las actividades administrativas de nuestra planta se reducirán a labores imprescindibles’, dice el comunicado.
En el documento, que está dirigido a los colaboradores y al equipo de trabajo, se explica que la planta se encuentra ‘en una situación sumamente difícil’, por diferentes causas, ajenas a la voluntad de la empresa, que afectan la continuidad operacional, ‘debido a la falta de piezas’.
A través del comunicado, publicado en su totalidad en el diario Últimas Noticias, los responsables de la planta, ubicada en la ciudad de Cumaná, estado Sucre (este) informan a sus empleados que el comienzo de parada de producción de cada área será informada próximamente.
‘Inicialmente, durante las primeras dos semanas de parada de producción, Toyota garantiza el pago del salario básico y de beneficios contractuales asociados, y en lo sucesivo, se les informará sobre las propuestas que puedan surgir para afrontar la delicada situación y garantizar la supervivencia de la empresa’, dice el escrito.
‘Estas medidas y acciones son necesarias y obligadas, para la supervivencia y la continuidad de la empresa, por lo que contamos con su apoyo y unidad para salir adelante’, finaliza el comunicado.
El martes pasado, la Cámara Automotriz de Venezuela (Cavenez) informó que la producción de vehículos en las ensambladoras privadas venezolanas registró una caída de 84,78 % en enero de este año en comparación al mismo mes de 2013, al producir 296 unidades frente a las 1.945 unidades el año pasado.
El presidente de Cavenez, Enrique González, dijo entonces a Efe que la drástica caída de la producción privada obedece al ‘gran nivel de deuda con proveedores internacionales’ por los ‘atrasos en la escasa’ oferta de divisas entregada a los privados.
En Venezuela rige un sistema de control de cambios desde 2003 que deja en manos del Estado el monopolio de la administración de divisas.