Toyota Land Cruiser D4-D

Inicio

El nuevo Land Cruiser de 4,85 m de longitud y más de 2,1 toneladas de peso en esta versión (la más alta), heredero de una larga tradición, llega manteniendo lo mejor del anterior Land Cruiser e incorporando los últimos avances electrónicos que facilitan su conducción y mejoran la seguridad de marcha. Se trataba de mantener sus características tradicionales, es decir, su alta eficacia en todo terreno, pero mejorando el comportamiento en carretera (básicamente su estabilidad y nivel de ruido) que es lo que se ha conseguido, acercando de paso la conducción off-road con seguridad a todo tipo de personas. Inicialmente se ha lanzado sólo la versión D4-D, la más interesante para el mercado español, que debe copar el mayor número de las ventas. Más adelante, llegarán las versiones de gasolina con un nuevo motor de 4 litros y 249 CV.

Motor
y conducción

MOTOR Y CONDUCCION

El D4-D de 3 litros y 163 CV es un motor que destaca por su alto rendimiento y consumos bastante ajustados, que muestra un gran empuje desde 1.900/2.000 vueltas y lo mantiene hasta las 3.400 (régimen de potencia máxima). No hay tanto empuje por debajo de las 1.900 rpm pero esto no le crea problemas en la práctica del todo terreno y cuando se necesita se puede conectar la reductora, con desarrollos muy cortos, para salir airoso de cualquier situación comprometida. En carretera sólo se echa de menos mayor velocidad punta (la oficial es de 165 km/h) para las características del nuevo L.C., ya que su estabilidad a esa velocidad, y pese a sus inercias por volumen y peso, es francamente buena. Aun más, el reducido nivel sonoro, fruto de su estructura reforzada, buena aerodinámica y del empleo de material insonorizador hace que se le pida más, pero hay que tener en cuenta que su peso oficial en vacío es de 2.180 kg, lo que junto a su tamaño no le permite ser muy ágil en carreteras de curvas.

El sistema de tracción 4×4 permanente es también una garantía de seguridad importante en cualquier terreno y que otros fabricantes de la competencia no ofrecen.
Pero en el caso de la versión probada, la más completa de terminación y con la carrocería de 5 puertas, la gran novedad estriba, sin duda, en el sistema de suspensión neumática, en la que los muelles han sido sustituidos por cilindros neumáticos. Con ello se consigue un confort de marcha superior tanto en carretera como en pistas. Además, a la hora de superar obstáculos permite subir la carrocería, eligiendo entre tres posibles alturas: la normal de marcha; una segunda posición 3 cm por encima, sólo para superar una zona complicada y siempre a una velocidad inferior a 50 km/h; mientras que la tercera posición, 3 cm por debajo de la normal, está pensada para maniobrar en un garaje y se mantiene siempre que no se superen los 12 km/h.

Junto con este sistema de suspensión ofrece la regulación de la dureza de la misma. Así mediante un mando situado al lado del de la altura del vehículo se pueden seleccionar cuatro niveles de dureza: dos más blandos, quizá excesivamente blandos, y otros dos a gusto de cada conductor.Igualmente son totalmente nuevos los sistemas de ayuda a la conducción que estrena el nuevo Land Cruiser, como el control de estabilidad que incluye también el control de tracción, sistema de arranque en pendiente y el control de descenso. Con todo ello, una persona sin el menor conocimiento de la conducción de un todo terreno puede enfrentarse a las zonas más complicadas y salir airoso. Aspecto éste que puede ser bueno para el 99% de los usuarios, aunque no lo sea tanto para los puristas del mundo TT.
El sistema de tracción es permanente a las cuatro ruedas y cuenta con un diferencial central Torsen que en condiciones normales reparte el 40% del par a las ruedas delanteras y el 60% a las traseras. Esto hace que sea muy agradable de conducir tanto en carretera como en asfalto por esa preponderancia del tren trasero. Cuando las circunstancias se complican y se empieza a perder adherencia, el 40:60 se puede convertir en 29:71 ó en 53:47 según las ruedas que patinen en el momento.
Además, y como una opción para los más expertos, el diferencial central puede ser bloqueado mediante un pulsador en el cuadro de instrumentos. Entonces se desconecta también el control de estabilidad, por lo que es el conductor el que asume toda la responsabilidad de la conducción y el que debe hacerse con el control del vehículo en todo momento. El bloqueo del diferencial posterior no está contemplado.
Por otra parte, el nuevo Land Cruiser cuenta con un control de tracción activo que ha sido especialmente desarrollado para su uso en carretera y en conducción off-road. De este modo, es el propio sistema el que detecta en cada momento si se circula en asfalto o fuera de él, y al mismo tiempo es adaptativo, o sea, se adapta a la manera de conducir de la persona que se sienta al volante. Así cuando circulamos sobre nieve o hielo el sistema actúa principalmente reduciendo la potencia del motor, mientras que en una utilización todo terreno lo que hace es recurrir más al sistema de frenos. Este control de tracción activo, desarrollado por los técnicos de Toyota, es una alternativa a los diferenciales bloqueables de las anteriores generaciones del Land Cruiser. Lo positivo es que resulta mucho más sencillo de manejar, pero en el otro fiel de la balanza está el que el conductor no controla nada por sí mismo y depende de la electrónica del vehículo. La verdad es que durante los kilómetros que hemos realizado con el coche en ningún momento ha planteado problemas, pero desde luego entendemos que los más puristas se quejen de este cambio de rumbo.
También, como parte de las ayudas a la conducción, el nuevo Land Cruiser incorpora el control de estabilidad o VSC. Este sistema actúa como el control de estabilidad de un turismo normal, detectando cuando se está circulando demasiado deprisa en una zona y se está perdiendo el control del vehículo. Gracias al sistema VSC lo que en condiciones normales deberíamos hacer para controlar el coche, como «contravolantear» en una curva, lo hace el propio vehículo por sí solo frenando unas ruedas y transmitiendo más par a las otras. Su funcionamiento resulta muy correcto y ayuda a compensar el eje rígido posterior cuando se circula en carretera.

Diseño
y equipamiento

DISEÑO Y EQUIPAMIENTO

Otra de las novedades del Land Cruiser 2003 es su aspecto estético, muy evolucionado y que nos parece un acierto, así como la buena calidad percibida en su acabado, si bien algunos plásticos podrían mejorarse para el precio que tiene el vehículo. Aunque el nuevo Land Cruiser está basado en la plataforma del anterior, a las líneas de identidad de Toyota se han incorporado rasgos más al gusto europeo y otros retoques para modernizar su aspecto exterior. Así, destacan los nuevos faros de cristal transparente y un frontal que no renuncia a la imagen de robustez propia del todo terreno que es.

La rueda de repuesto en esta versión VXL, no va sobre el portón trasero, sino bajo el vano del maletero, lo que le da un aspecto más próximo al de un monovolumen que al de un todo terreno de verdad. Sin embargo, las versiones menos lujosas la llevan en el portón trasero. En cuanto a las dimensiones interiores, el nuevo Land Cruiser mantiene las buenas cotas de su antecesor, con un maletero de generosas dimensiones con 5 pasajeros y unas plazas realmente amplias tanto delante como detrás. Esta versión de cinco puertas cuenta además con una tercera fila de asientos más propia para niños por su espacio para piernas, que va plegada a ambos lados del vano de carga y que mediante una sencilla operación se puede bajar.
En resumen, este nuevo Land Cruiser puede resultar para los puristas del TT un vehículo más próximo a los todocamino actuales, mientras que para los que no son tan aficionados al mundo del todo terreno es un coche que les permite disfrutar de la conducción off-road con un confort inigualable para tratarse de un todo terreno, tanto por suspensión como por nivel sonoro y diversos refinamientos.

En cualquier caso es un coche muy completo. Lo es porque tiene un motor brillante de consumo moderado como el D4-D y por su sistema de tracción permanente a las cuatro ruedas. Si a esto sumamos las notables mejoras que incorpora: la suspensión neumática (no en todas las versiones), el control de estabilidad, la regulación de la dureza de la suspensión, el control activo de tracción y los controles de subida (HAC) y de descenso (DAC), está claro que nos encontramos ante el coche más avanzado en el mundo del todo terreno.
En cuanto a precios, éstos varían mucho según versiones, ya que van desde los 30.875 euros de la versión 3 puertas con el acabado básico, hasta los 49.750 euros que cuesta el 5 puertas con el acabado VXL y el cambio automático. Por lo que respecta a la versión objeto de esta prueba, el 5p VXL manual, su precio es de 47.370 euros, una cantidad bastante razonable para su equipa miento.

This website uses cookies to improve your experience. We'll assume you're ok with this, but you can opt-out if you wish. Accept Read More

Privacy & Cookies Policy