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Llega la novena generación del Civic completamente renovada bajo el lema Evolución revolucionaria, que implica un importante cambio de diseño y, más importantes aún, una gran potenciación de sus cualidades que hacen de él uno de los más interesantes modelos del segmento C y un auténtico icono para la marca japonesa, del que se han vendido a lo largo de su historia algo más de 20 millones en todo el mundo. De hecho, abre una nueva era para los próximos años de la marca, en los que se van a renovar prácticamente todos los modelos, desde el Accord hasta el CRV, pasando por el Insight y algún nuevo modelo en nuevos segmentos, así como se espera la llegada para finales de 2012 de un nuevo motor diésel de 1.6 litros de alto rendimiento y bajo consumo.
Si la octava generación consiguió en el mercado un impacto sorprendente, esta novena generación pretende ser aún más llamativa manteniendo, eso sí, el ADN propio del modelo con un diseño tan revolucionario, futurista y extravagante como siempre. En el nuevo Civic los ingenieros han reforzado más si cabe sus atributos y puntos fuertes de deportividad y practicidad, llevándolo hasta límites desconocidos, y han corregido sus anteriores deficiencias en cuanto a matices de ergonomía y consumos, ahora algo más afinados. Esto se ha llevado a cabo gracias a la atención a las demandas y necesidades de los clientes, a los que se ha prestado mucha atención.
Aunque a la vista no se aprecie claramente, prácticamente todos los componentes del nuevo Civic son nuevos o han experimentado cambios, desde la suspensión y los motores, hasta el diseño exterior y la aerodinámica, pasando por los materiales del interior. Por ejemplo, la versión diésel que estrena el nuevo motor 2.2 i-DTEC de 150 cv y 350 Nm de par con sistema de arranque y parada automáticos Auto Stop de serie homologa unas emisiones de 110 gr/km, con lo que se elimina el impuesto de circulación, todo un ejemplo a seguir por el resto de marcas.
Por cierto, a pesar de que su lanzamiento está previsto para febrero de 2012, ya conocemos los precios y las distintas versiones del Civic:
-Civic 1.4 i-VTEC 100 cv Comfort: 18.900 euros
-Civic 1.4 i-VTEC 100 cv Sport: 20.500 euros
-Civic 1.8 i-VTEC 142 cv Sport: 22.700 euros
-Civic 1.8 i-VTEC 142 cv AT Sport: 23.900 euros
-Civic 1.8 i-VTEC 142 cv Executive: 26.800 euros
-Civic 1.8 i-VTEC 142 cv AT Executive: 28.000 euros
-Civic 2.2 i-DTEC 150 cv Comfort: 22.500 euros
-Civic 2.2 i-DTEC 150 cv Sport: 24.200 euros
-Civic 2.2 i-DTEC 150 cv Executive: 28.300 euros
Por otra parte, para el Executive se puede adquirir opcionalmente un navegador con disco duro HDD por 2.200 euros, o ese mismo navegador con disco duro combinado los innovadores sistemas de seguridad control de velocidad por radar ACC y mitigacion de impactos CMBS por 4.000 euros.’El nuevo Civic innova en tres frentes: una mejor aerodinámica, motores más eficientes y una calidad de conducción excepcional’El nuevo Civic innova en tres frentes: una mejor aerodinámica, motores más eficientes y una calidad de conducción excepcional
El desarrollo del nuevo Civic se ha basado en tres pilares fundamentales, un diseño exterior e interior puesto a punto con una mejor aerodinámica y una mejor ergonomía, una el desarrollo de nuevos motores más eficientes tanto en gasolina como en diésel y una mejora sustancial en la calidad de conducción mediante claras mejoras de chasis.
Mejor aerodinámica y ergonomía interior
Sobre una carrocería de cinco puertas, el nuevo Civic presenta un aspecto tan deportivo como antes pero más refinado y elegante gracias a unas mayores dimensiones, siendo 45 mm más largo, 10 mm más ancho y 20 mm más bajo, con lo que consigue un aspecto más sugerente y distinguido. Además sustituye los plásticos transparentes por elementos más refinados como una calandra en color oscuro o unos faros traseros más pequeños.
Sobre una carrocería de cinco puertas, el nuevo Civic presenta un aspecto tan deportivo como antes pero más refinado y elegante gracias a unas mayores dimensiones, siendo 45 mm más largo, 10 mm más ancho y 20 mm más bajo, con lo que consigue un aspecto más sugerente y distinguido. Además sustituye los plásticos transparentes por elementos más refinados como una calandra en color oscuro o unos faros traseros más pequeños.
La aerodinámica ha sido el objetivo fundamental a mejorar, colaborando para su desarrollo el equipo de Fórmula 1 de Honda Racing Team. Por ello presenta una carrocería menos redondeada y un nuevo frontal más bajo muy llamativo, con una original calandra unida a parte central del paragolpes pintada en el mismo color oscuro que se alarga hasta los afilados faros. Llaman la atención en la zona inferior las amplias rejillas laterales con los antiniebla y una tira de de led´s horizontal de iluminación diurna y una central de refrigeración que se cierra en la versión diésel para mejorar la aerodinámica. El lateral presenta un habitáculo en forma de cuña con una mínima supoerficie acristalada, sobre todo atrás, con unos pasos de rueda esculpidos y prominentes con una línea dinámica que va del frontal a la zaga. Curiosamente, la versión diésel incorpora en las aletas traseras unas pequeñas molduras verticales con una función meramente aerodinámica. Esta zona también cambia ligeramente aunque es bastante notorio por el empleo de unas ópticas más pequeñas que sustituyen la tulipa central transparente por una tercera luz de freno roja que va de lado a lado y parte en dos la luneta trasera. En general muestra una carrocería más ancha y baja que su antecesor, con lo que consigue una imagen más aplomada y deportiva. Con la mejora aerodinámica se reducen los consumos en el entorno de un 10 y un 12%, se aísla el interior de ruido exterior y se consiguen mejores prestaciones.
El diseño interior se ha optimizado empleando nuevos materiales que transmiten sensación de mayor calidad en todo el habitáculo. Para mejorar la ergonomía se ha modificado el asiento del conductor, que ahora incluye apoyo lumbar y lateral, y se ha creado un cockpit más definido con dos zonas diferenciadas, el área de conducción y el área de confort, acercando y diferenciando todos los mandos fundamentales para la conducción y control de la marcha, como la palanca de cambios más cerca de la mano, el freno de mano alejado para molestar menos o los sistemas de medición en dos niveles, como siempre, más a la vista. En la zona superior encontramos una nueva pantalla de información TFT a color en 5 pulgadas denominada i-MID, que incorpora nuevas informaciones relevantes para el conductor como advertencias de seguridad, mantenimientos y las indicaciones del navegador si lo lleva, mientras que en la inferior la consola central acerca los sistemas de climatización y de audio. Un pequeño detalle de atención al conductor es el volante multifunción, con una nueva disposición de los mandos más cómoda, una nueva piel más suave y refinada y un mayor grosor que lo hace mucho más confortable. Desde el acabado base Comfort el Civic ofrece la pantalla interior multifunción o iluminación diurna por led, mientras que el Sport incluye cámara de visión trasera, incluso sin navegador, climatizador bizona y espejos plegables con el mando a distancia, teniendo que recurrir ya al Executive si buscamos lujos como el equipo de audio Premium con Bluetooth, techo panorámico, faros bixenón con luces automáticas, entrada sin llave, asientos con ajuste eléctrico, etc.
Por otra parte se ha mejorado la visibilidad trasera, una de las deficiencias de la anterior generación, ampliando la zona baja de la luneta trasera e incluyendo el limpialunetas. Además se ha aumentado el espacio del maletero ganándole 21 litros hasta llevarlo a los 477 litros en el cofre y bajo la tapa del maletero, que le coloca como líder del segmento. Si se opta por la rueda de emergencia opcional en lugar del kit antipinchazos, se pierden los 76 litros bajo la bandeja, quedándose en 401. Una funcionalidad que se mantiene son los asientos Honda Magic Seat, que permiten cargar todo tipo de objetos abatiéndose de varias formas diferentes.Todos los motores gasolina y diésel mejoran prestaciones reduciendo los consumos incorporando la función de conducción Eco-Assist y sistema Auto Stop
Más prestaciones y eficiencia
Gracias en parte a las mejoras aerodinámicas y a la adaptación de sistemas de serie como la función de conducción Eco Assist, que ayuda a realizar una conducción más ecológica y económica, o el sistema de arranque y parada automático Auto Stop, se ha logrado reducir las cifras de consumo y emisiones con todos los motores, sobre todo en el diésel, ganando incluso bastante en sus cifras de prestaciones. En gasolina los motores son los mismos de la anterior generación aunque con ligeras modificaciones, como el 1.4 i-VTEC de 100 cv a 6.000 rpm y 127 Nm de par a 4.800 rpm con cambio manual de 6 velocidades, que logra unas emisiones de 129 gr/km y un consumo medio de 5,4 litros a los 100 km, una velocidad máxima de 187 km/h y acelerar hasta los 100 km/h en 13,4 segundos, o el 1.8 i-VTEC que se ha modificado para entregar 142 cv a 6.500 rpm y un par de 174 Nm a 4.300 rpm y puede ir con cambio manual de 6 velocidades o automático de 5, mientras que sus emisiones se quedan en 145 gr/km y su consumo medio en 6,1 litros, alcanzando los 215 km/h y acelerando hasta 100 km/h en 9,4 segundos (con 150 gr/km, 6,4 litros/100 km, 210 km/h y 11,2 segundos de 0 a 100 km/h con cambio automático de 5 relaciones), ambos con un pequeño impuesto de matriculación del 4,75% sobre el precio base.
Gracias en parte a las mejoras aerodinámicas y a la adaptación de sistemas de serie como la función de conducción Eco Assist, que ayuda a realizar una conducción más ecológica y económica, o el sistema de arranque y parada automático Auto Stop, se ha logrado reducir las cifras de consumo y emisiones con todos los motores, sobre todo en el diésel, ganando incluso bastante en sus cifras de prestaciones. En gasolina los motores son los mismos de la anterior generación aunque con ligeras modificaciones, como el 1.4 i-VTEC de 100 cv a 6.000 rpm y 127 Nm de par a 4.800 rpm con cambio manual de 6 velocidades, que logra unas emisiones de 129 gr/km y un consumo medio de 5,4 litros a los 100 km, una velocidad máxima de 187 km/h y acelerar hasta los 100 km/h en 13,4 segundos, o el 1.8 i-VTEC que se ha modificado para entregar 142 cv a 6.500 rpm y un par de 174 Nm a 4.300 rpm y puede ir con cambio manual de 6 velocidades o automático de 5, mientras que sus emisiones se quedan en 145 gr/km y su consumo medio en 6,1 litros, alcanzando los 215 km/h y acelerando hasta 100 km/h en 9,4 segundos (con 150 gr/km, 6,4 litros/100 km, 210 km/h y 11,2 segundos de 0 a 100 km/h con cambio automático de 5 relaciones), ambos con un pequeño impuesto de matriculación del 4,75% sobre el precio base.
Pero el que más sorprende es el diésel, que se trata del nuevo 2.2 litros i-DTEC de 150 cv a 4.000 rpm y 350 Nm de par motor entre las 2.000 y las 2.750 rpm, heredado de sus hermanos Accord y CRV y que sustituye al 2.2 i-CTDI de 140 cv, con una cifras de prestaciones mucho mejores y sin embargo menores consumos y emisiones, gracias a determinados trabajos en aerodinámica como la parrilla delantera con obturador automático o las molduras de plástico en las aletas traseras derivadas del túnel del viento. Combinado siempre con un cambio manual de 6 velocidades acelera de 0 a 100 km/h en 8,5 segundos, alcanza los 217 km/h, consumiendo 4,2 litros de media a los 100 km y emitiendo tan sólo 110 gr/km.
Mejor comportamiento dinámico
El chasis ha experimentado una revolucionaria evolución oculta, con modificaciones fundamentales en la suspensión que está puesta a punto para mejorar el compromiso entre confort y eficacia. Como siempre el eje delantero es un sistema McPherson y el trasero opta por una barra de torsión 2 mm más gruesa, superando incluso a la del deportivo Type R de anterior generación, a la que añade un nuevo silent-block hidráulico que mejora el refinamiento y la estabilidad de la amortiguación a la hora de absorber baches transmitiendo menos vibraciones y ruidos. La desmultiplicación de la dirección se ha modificado profundamente para mejorar el guiado a alta velocidad, reduciendo el giro del volante al afrontar curvas enlazadas.
El chasis ha experimentado una revolucionaria evolución oculta, con modificaciones fundamentales en la suspensión que está puesta a punto para mejorar el compromiso entre confort y eficacia. Como siempre el eje delantero es un sistema McPherson y el trasero opta por una barra de torsión 2 mm más gruesa, superando incluso a la del deportivo Type R de anterior generación, a la que añade un nuevo silent-block hidráulico que mejora el refinamiento y la estabilidad de la amortiguación a la hora de absorber baches transmitiendo menos vibraciones y ruidos. La desmultiplicación de la dirección se ha modificado profundamente para mejorar el guiado a alta velocidad, reduciendo el giro del volante al afrontar curvas enlazadas.
La seguridad es otro punto clave de este nuevo Civic, incluyendo por primera vez en un coche del segmento compacto elementos de seguridad activa como el control de velocidad adaptativa ACC o el sistema de prevención y mitigación de impactos CMBS.