Fiat Punto 1.3 JTD 75 cv

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ATRACTIVO Y DE CALIDAD

  Fiat parece “levantar el vuelo” con el Grande Punto, un utilitario que en Europa se está vendiendo fenomenal y que en España, aunque lejos de los Clio o Ibiza, está cogiendo por fin una cuota de mercado representativa. Y es que si el nuevo utilitario de Fiat en nuestro mercado no vende más, las razones las deberíamos buscar en posibles prejuicios hacia la marca, en el tirón de los superventas antes mencionados, o en otro tipo de causas; ya que por calidad de producto el italiano se encuentra en una posición privilegiada; además de tener una carrocería muy atractiva.
En Autocity probamos el motor diesel básico, es decir, el 1.3 JTD de 75 cv, versión que por poco más de dos millones de pesetas ofrece calidad, espacio, conducción muy agradable y una mecánica de prestaciones suficientes y bajos consumos. Además, tirando de la larga lista de opciones podemos dejar al Grande Punto a nuestro gusto y muy equipado, tanto en cuestiones de seguridad como de lujo y confort.
En las siguientes páginas vamos a analizar este Fiat Grande Punto 1.3 JTD 75 cv, un utilitario de última generación que sigue dos tendencias claras. Primera la de crecer y crecer hasta llegar a un tamaño que hace muy poco tenían los compactos (un Fiat Bravo o un Renault Megane Coupe de los 90 no eran más grandes), pues mide 4,03 metros de largo. Y segunda la de montar pequeños y modernos motores turbodiesel de baja cilindrada con consumo reducido y de respuesta más que aceptable. De hecho todos sus rivales disponen de este tipo de motores como escalón de acceso a gama, aunque la mayoría de cilindrada ligeramente superior y de potencia algo menor: Citroen C3 1.4 HDi 70cv, Renault Clio 1.5 dci 70 cv o Seat Ibiza 1.4 TDi entre otros.
Enrique Marco, Autocity.
7 de Marzo de 2006
DISEÑO Y EQUIPAMIENTO

Siempre decimos que lo del diseño es algo muy personal, pero casi todas opiniones recogidas acerca del estilo de su carrocería fueron positivas. Por proporciones no es que sea muy deportivo, pues es alto (1,49 metros) y no muy ancho (1,69 metros); pero entre la acusada inclinación del parabrisas, la generosa toma de aire frontal, los pasos de rueda abultados y la compacta parte trasera, nos hace verlo como un gran coche, lejos del concepto de carrocería tipo “huevo” del que se les acusa a algunos rivales. Aún así, el Grande Punto ofrece un gran espacio para los ocupantes y un maletero de 275 litros (con los asientos abatidos y cargado hasta el techo puede llevar 1.030 litros).
Y como antes hemos dicho en la página de “Conducción”, la postura al volante está en consonancia con el estilo de la carrocería. Es decir, nada “monovolumenarizada” y con una banqueta que permite ir bastante bajo, en posición casi deportiva. Además, los asientos –aunque en este nivel de acabados no eran los deportivos- recogen bien el cuerpo y son cómodos. Por último decir que el buen aspecto de mandos y materiales hace que se esté a gusto a bordo del Grande Punto.
La versión más económica con el motor 1.3 JTD 75 cv cuesta 12.800 euros (Active); y aunque ya en este precio entran de serie unas cuantas cosas (ABS, EDB, airbags frontales y de cortina, cierre con mando, dirección dualdrive…) elementos como el climatizador van aparte en las versiones más básicas, teniendo que desembolsar 1.050 euros más. Por 13.450 euros el acabado Dynamic añade algunos detalles más, y luego con la larga lista de opciones se puede hacer un coche prácticamente “a la carta” y a precios razonables.
p>Recordemos que junto al Grande Punto 1.9 JTD de 130 cv Sport (17.650 euros), existe una versión más evolucionada del 1.3 JTD que eleva la potencia de 75 a 90 cv, y además lleva una caja de cambios manual de seis velocidades (de cinco en el 75 cv) y se vende de 14.600 a 16.000 euros. En resumidas cuentas, que entre el 1.3 JTD de 75 o de 90 cv, y el 1.9 JTD 130, los distintos niveles de equipamiento y opciones, y la carrocería de tres o de cinco puertas, el Grande Punto se ajusta prácticamente a las necesidades o preferencias personales y económicas de cada uno.
CONDUCCION

Cada vez es más frecuente encontrarse con utilitarios que siguen las tendencias de los monovolúmenes; es decir, con una posición al volante elevada, huecos por todos los lados, salpicaderos de diseños muy originales, etc. No dudamos de su práctico uso en ciudad y para los recados cotidianos, pero para la mayoría de los que nos gusta conducir, y sobre todo para la carretera, estas tendencias no aportan nada positivo.
El Fiat Grande Punto no va por ahí, y al volante nos situamos en una postura muy cómoda (que puede ser con la banqueta bastante baja), y con una posición respecto al volante y a los mandos muy adecuada. La calidad de los materiales parece buena, y la distribución del cuadro de relojes muy convencional. Eso sí, tiene toques de frescura y alegría como la combinación cromática en asientos, guarnecidos y consola.
Ya en marcha, el pequeño motor diesel –si bien en frío, como es lógico, no oculta mucho el ruido- demuestra su elevada tecnología: turbo, common rail, culata de 16 válvulas… A velocidad de crucero apenas se percibe su sonido, no transmite vibraciones, y entrega la potencia de forma fina y agradable. Evidentemente no es un alarde de empuje, pero con un par de 190 Nm a 1.750 rpm podemos practicar una conducción relativamente ágil.
La potencia no decepciona, y su agradable tacto de conducción hace que la nota final de comportamiento dinámico sea bastante elevada. Con un chasis muy bien desarrollado y de tamaño considerable, el Grande Punto monta en esta versión unas suspensiones más bien blandas. De este modo resulta muy cómodo, pero gracias a su buena estructura también es estable. Es un coche que da confianza al volante sin necesidad de recurrir a tarados de amortiguación duros, lo que unido al correcto funcionamiento de frenos y cambio de marchas completa el positivo balance.
Si hablamos de prestaciones lógicamente nadie va a sorprenderse, pero en los tiempos que corren una velocidad máxima de 165 km/h nos parece muy respetable, y aunque la aceleración de 0 a 100 km/h sea simplemente normalita (13,6 segundos), las recuperaciones y los adelantamientos no andan nada mal, y eso que el peso total del coche es de 1.090 kilos. Pero está claro que una de las razones de ser de este coche es el consumo, y con sólo 4,0 l/100 km en carretera (4,7 l/100 km como media) vemos como a la hora de parar en la gasolinera nos ha compensado no llevar un ‘bomba’ de motor.
En definitiva, un utilitario que ha crecido hasta hacerse mayor, y que si bien en ciudad va de maravilla, gracias en parte a la suavísima dirección asistida con “función City”, en carretera (volviendo a situar mediante el botón la asistencia de la dirección en posición “normal”) no tiene nada que envidiar a vehículos de segmentos algo superiores. Con su gran tamaño, es cierto que hay utilitarios todavía más ágiles y “ratoneros” para la ciudad; pero si se piensa en esta compra como coche único y de vez en cuando hay que salir de la ciudad, éstos “minis” o “urbanos” de 3,5 a 3,7 metros pierden –la mayoría de ellos- su ventaja en la urbe a la mínima que se enfrentan a la carretera.

A favor y en contra

A FAVOR Y EN CONTRA

A favor:

+ Estética acertada.
+ Conducción agradable.
+ Mecánica eficaz.

En contra:
+ Equipamiento en versiones de acceso.
+ Ya no es de los utilitarios más baratos.

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