Conducción del Quattro

CURSOS SOBRE NIEVE

  Seguridad y eficacia son dos palabras clave sobre las que se asienta el principio de los sistemas de tracción a las cuatro ruedas, una técnica para la transmisión que, como bien podemos comprobar, no sólo es recomendable para los vehículos todoterreno, si no que también proporciona muchas ventajas a los turismos. Alfa Romeo cuenta con los Q4, BMW con los X, Mercedes con los 4Matic, etc; pero la marca que mayor partido ha sabido sacar a sus sistemas de tracción integral ha sido Audi, con los conocidos Quattro, gracias a su dilatada experiencia, sobresaliente funcionamiento y variada oferta.

Para probar su eficacia y explicar su funcionamiento, nada mejor que experimentar con estos automóviles en terrenos tan difíciles como la nieve o el hielo. Esta práctica está disponible para los clientes de la marca gracias a la Escuela de Seguridad y Conducción Audi, la cual dispone de varios cursos: Básico, avanzado, deportivo, uno específico del A8 y otro sobre la nieve.

Enrique Marco, Autocity.
14 de Febrero de 2006

CURSOS SOBRE NIEVE

La Escuela de Conducción y Seguridad Audi ha vuelto este invierno, por tercer año consecutivo, a su sede permanente en Grandvalira en el área de Soldeu (Andorra), después del gran éxito y la gran participación cosechada durante las últimas dos temporadas. El objetivo de estos cursos – exclusivos para los clientes de la marca – es proporcionar a los participantes las claves de una conducción segura en un medio al que no están habituados, mediante la realización de distintas pruebas al volante de los nuevos Audi A4 Avant –derrapaje controlado, control del ABS, combinaciones de curvas y slalom...- y con las máximas garantías de seguridad.

En él, se aprende a dominar un Audi en situaciones adversas de nieve y hielo. Para la ocasión se dota a los automóviles de neumáticos “de invierno” o “de contacto”, los cuales son muy recomendables para quien transita habitualmente por estas zonas; pero no de clavos, ya que éstos le darían un comportamiento diferente y en la práctica sólo se montan el competición o para vehículos específicos.

Como servicios adicionales, se ofrece la posibilidad de que los participantes en el curso puedan disfrutar de otros servicios: actividades de aventura (trineos, motos de nieve, vuelo en parapente, etc…), forfaits, alojamiento, restauración, etcétera. Este evento demuestra, una vez más, la ya tradicional política de Audi de apoyo a los deportes de invierno. Con una ubicación privilegiada, que asegura una nieve de calidad durante toda la temporada, Grandvalira ha supuesto el nacimiento del mayor dominio esquiable de los Pirineos. Sus 193 kilómetros, repartidos en 110 pistas, 4 itinerarios Ratrac, 3 áreas Freestyle y muchas otras instalaciones de alto nivel, le han permitido ingresar en el club de las estaciones invernales más importantes de Europa. La vinculación de Audi con los deportes de invierno se inició en 1995, con el patrocinio de la Copa del Mundo de Esquí Alpino, una modalidad deportiva que encaja a la perfección con el espíritu de sus modelos y que sirve como escaparate tecnológico para un sistema en el que la marca alemana fue pionera y que este año celebra su 25º aniversario, la tracción a las cuatro ruedas Quattro. En 1996, Audi también estuvo presente en los Mundiales de Sierra Nevada y, desde entonces, es uno de los más importantes patrocinadores en las competiciones de máximo nivel del esquí alpino.

EL SPOT DE TV DEL TRAMPOLIN

¿Subía de verdad el Audi A6 por el trampolín? Los anuncios de automóviles para televisión son lo más parecido a una película. En Volkswagen y Audi siempre han tenido unos impactantes spots, pero éste del trampolín de esquí ha sido especialmente espectacular. De hecho, entre los aficionados al motor muchos debatieron sobre si se trataba de un montaje o en realidad el A6 podía subir una rampa de saltos de esquí. La respuesta es clara, el Audi A6 4.2 Quattro Tiptronic subió la pendiente de nada menos que 37,5 grados de inclinación por sí sólo, con el piloto Uwe Bleck al volante.

Cierto es que se colocó un cable, pero no para arrastre, si no por seguridad y para retenerlo una vez arriba. El spot –emitido la pasada primavera- se rodó el 24 de enero de 2005 en Kaipola (Finlandia), en la pista de salto de Pitkävuori. Se hicieron un total de 11 ascensiones, en primera velocidad, a 4.200 rpm y a 60 km/h. Eso sí, los neumáticos eran de clavos de 6 milímetros, similares a los que se utilizan en los Rallys de Monte Carlo o Suecia.